El misterio del llamado del Señor Jesucristo y Su Esposa, desde Su Casa, en el Día Postrero

Muy buenas tardes, amados hermanos y amigos presentes, y televidentes. Es para mí una bendición grande estar con ustedes en esta ocasión, para tener unos momentos de compañerismo espiritual alrededor de la Palabra de Dios; y así tener un mejor entendimiento de todo el Programa Divino correspondiente a este Día Postrero.

Quiero leer en Apocalipsis, capítulo 22, verso 16 al 17, donde nos dice de la siguiente manera:

Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.

Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”.

Que Dios bendiga en nuestras almas Su Palabra y bendiga nuestras almas con Su Palabra, y nos permita entenderla.

Nuestro tema para esta ocasión es: “EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO”.

Aquí en Apocalipsis, capítulo 22, verso 17, encontramos el llamado del Esposo y también el llamado de la Esposa. El llamado del Esposo es el llamado del Espíritu Santo, y el llamado de la Esposa es el llamado de la Iglesia del Señor Jesucristo.

Ahora, vean cómo aquí:

“… el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”.

Aquí tenemos el llamado de Jesucristo en Espíritu Santo por medio de Su Ángel Mensajero en el Día Postrero, así como el llamado de Cristo en Espíritu Santo en cada edad fue el llamado de Jesucristo en Espíritu Santo por medio de cada ángel mensajero, llamando y juntando a los escogidos de cada edad, en el territorio donde se cumplió cada edad.

En ese territorio estaban los escogidos de Dios, los primogénitos de Dios, que escucharían la Voz de Cristo y recibirían Su Mensaje, y entrarían a formar parte de la Iglesia del Señor Jesucristo; o sea, vendrían a formar parte del Redil del Señor Jesucristo, en donde Cristo, por medio del ángel mensajero en cada edad, estaría pastoreando Sus ovejas.

Cristo en San Juan, capítulo 10, verso 14 al 16, dice:

“Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen,

así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.

También tengo otras ovejas que no son de este redil (o sea, que no son del redil hebreo); aquellas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor”.

Vean cómo escucharon la Voz de Cristo las ovejas del rebaño o del redil gentil, las cuales serían llamadas y juntadas y colocadas en el Redil de Cristo, en donde Cristo estaría pastoreando Sus ovejas.

Esto ha estado sucediendo de edad en edad, por medio de cada ángel mensajero, a través del cual Cristo ha estado hablando y ha estado llamando y juntando a Sus ovejas.

¿Dónde las ha estado juntando? En Su Redil, o sea, en el Redil del Señor Jesucristo, que es Su Iglesia; la cual, de edad en edad ha ido creciendo a medida que Cristo ha ido llamando y juntando Sus ovejas de edad en edad.

Ahora, vean cómo de edad en edad Cristo estuvo en cada ángel mensajero llamando y juntando a Sus ovejas en cada edad, en el territorio donde se cumplió cada edad; y cuando han terminado las siete etapas o edades de la Iglesia gentil, Cristo todavía tiene ovejas aquí en la Tierra entre los gentiles, las cuales también debe traer; y oirán Su Voz, y habrá un Rebaño y un Pastor.

Este rebaño —como ya hemos visto— es el Cuerpo Místico de Cristo, la Iglesia del Señor Jesucristo; y en el Día Postrero son llamadas las últimas ovejas del Señor para ser colocadas en el Redil del Señor; y son colocadas aquí, en la Edad de la Piedra Angular, en el Redil del Señor, o sea, en la Iglesia del Señor Jesucristo.

Y en la Edad de la Piedra Angular, la Obra de Cristo, el llamado de Cristo por medio de Su Ángel Mensajero, estará siendo efectuado en el territorio de la América Latina y el Caribe; en donde estarán las ovejas que vendrán a formar parte de la Edad de la Piedra Angular en la Dispensación del Reino, y así estarán en el Redil del Señor, en la parte más importante de ese Redil, que es la Edad de la Piedra Angular, que es también la Edad del Lugar Santísimo de ese Templo espiritual, que es el Cuerpo Místico de Cristo, o sea, la Iglesia-Novia del Señor Jesucristo.

Y ese mismo llamado lo da la Iglesia del Señor Jesucristo, la Esposa del Señor Jesucristo, a todos los que tengan sed también: para que vengan y tomen del Agua de la vida eterna gratuitamente; y así tienen la oportunidad, los latinoamericanos y caribeños, de escuchar tanto al Espíritu de Cristo por medio de Su Ángel Mensajero, como a la Iglesia del Señor Jesucristo ungida por el Espíritu Santo, haciendo el llamado para todo ser humano.

Primero son llamados los escogidos por medio de la Voz de Cristo a través de Su Ángel Mensajero; y luego, encontramos que hay la oportunidad para todos los latinoamericanos y caribeños, para escuchar la Voz de Cristo en el Día Postrero y tener la oportunidad para entrar al glorioso Reino de nuestro amado Señor Jesucristo; y así tener también una oportunidad para recibir vida eterna de parte del Señor Jesucristo, creyendo en nuestro amado Señor Jesucristo y Su Obra correspondiente al Día Postrero, en donde también la Obra de Cristo en Su Primera Venida es dada a conocer, para que así todos sepan que ya Cristo pagó por nuestra redención allá en la Cruz del Calvario, y nos lavó con Su Sangre preciosa allá en la Cruz del Calvario.

Y solamente resta que el ser humano reciba esa Obra de Cristo realizada en la Cruz del Calvario, para lavar sus pecados así en la Sangre del Señor Jesucristo, y la persona ser justificada, y luego ser santificada; y los escogidos recibir el Espíritu de Cristo, y efectuarse en ellos el nuevo nacimiento.

Ahora, vean cómo estaría Cristo en el Día Postrero en Espíritu Santo haciendo el llamado final y dándole una oportunidad a los seres humanos en y desde la América Latina y el Caribe; ahí es donde el Espíritu y la Voz del Espíritu es escuchada en el Día Postrero, y también la Voz de la Esposa, porque:

“… el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera (porque toda persona tiene libre albedrío), tome del agua de la vida gratuitamente (reciba la Palabra de Dios en este Día Postrero para vida eterna)”.

En Amós, capítulo 8, verso 1, nos dice que habrá hambre sobre la Tierra; no hambre de pan ni sed de agua, sino de oír la Palabra de Jehová, la Palabra de Dios; porque, así como nuestro cuerpo físico siente hambre por comida natural, comida física, también nuestra alma siente hambre por comida espiritual, siente hambre por la Palabra de Dios; porque “no solamente de pan vivirá el hombre, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios”, nos dice Dios en Deuteronomio, capítulo 8 y verso 3; y lo repite nuestro Señor Jesucristo en San Mateo, capítulo 4, verso 4, y también San Lucas, capítulo 4, verso 4.

O sea que en esos lugares encontramos a Cristo diciendo nuevamente: “No solamente de pan vivirá el hombre, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios”: la Palabra que sale de la boca de Dios, la Palabra que sale del ángel mensajero del Señor Jesucristo de edad en edad, desde San Pablo hasta el Ángel del Señor Jesucristo. En cada edad hubo hambre de oír la Palabra de Dios que vino por medio de la boca de Dios, por medio del mensajero de Dios en cada edad.

Y ahora, para el Día Postrero, el hambre que hay, de oír la Palabra de Dios, es de oír la Palabra de Dios que sale de la boca de Dios: del Ángel Mensajero del Señor Jesucristo, que es la boca de Dios, la boca de Jesucristo en el Día Postrero; así como la boca de Jesucristo en cada edad fue el ángel mensajero de cada edad.

Por eso es que en Deuteronomio, capítulo 18, verso 15 en adelante, nos dice de la siguiente manera:

Profeta de en medio de ti (está diciendo aquí Moisés), de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios; a él oiréis…”.

¿Por qué él dice: “… a él oiréis”? Porque el profeta que Dios levanta en cada edad y en cada dispensación es la boca de Dios para esa edad o para esa dispensación; y ahí está la Palabra de Dios para el pueblo. Por eso: “A él oíd”. Oyéndolo a él ¿estarán escuchando qué? La Voz de Dios para ese tiempo.

Ahora, dice:

“… conforme a todo lo que pediste a Jehová tu Dios en Horeb el día de la asamblea, diciendo: No vuelva yo a oír la voz de Jehová mi Dios, ni vea yo más este gran fuego, para que no muera.

Y Jehová me dijo: Han hablado bien en lo que han dicho.

Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú (o sea, como Moisés); y pondré mis palabras en su boca…”.

¿Dónde Dios coloca Sus palabras? En la boca del profeta que Él envía en medio del pueblo.

Muchas personas quieren escuchar la Voz de Dios, pero no han comprendido que la Voz de Dios está en la boca del profeta mensajero que Dios envía para el tiempo en que ellos están viviendo.

Para escuchar la Voz de Dios, entonces lo que hay que conseguir es al ángel mensajero del Señor Jesucristo para la edad en que la persona está viviendo, y escuchar a ese ángel mensajero; y así estaremos escuchando la Voz de Dios, la Voz de Jesucristo, hablándonos las cosas que nosotros debemos entender en el tiempo que nos ha tocado vivir.

Todo lo que Dios tiene que decirnos a nosotros lo dice por medio de Su boca, por medio del profeta que Él envía para el tiempo en que le toca vivir a cada hijo e hija de Dios.

Y ahora, vean cómo continúa aquí diciendo; dice:

“… él les hablará todo lo que yo le mandare”.

¿Qué hablará ese profeta? Todo lo que Dios le mande a hablarle al pueblo; o sea, estará hablándole el Mensaje correspondiente a ese tiempo y dándole a conocer todas las cosas que Dios quiere darle a conocer a Su pueblo en ese tiempo.

Y ¿qué sigue diciendo, para los que digan que no les interesa escuchar la voz de ese profeta, el Mensaje de ese profeta? Pues los que no les interese escuchar la voz, el Mensaje de ese profeta, pues no les interesa escuchar la Voz de Cristo, la Palabra de Dios puesta en la boca de ese profeta.

¿Y cuáles son las consecuencias para esas personas? Dice:

“Mas a cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en mi nombre, yo le pediré cuenta”.

O sea que tendrá que dar cuenta delante de Dios en algún tiempo.

Y en el libro de los Hechos, capítulo 3, verso 18 al 23, nos dice: “Y cualquiera que no oyere a ese profeta (mas cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en Mi Nombre): Yo le desarraigaré del pueblo”, o sea que pierde el derecho a pertenecer al pueblo de Dios, y —por consiguiente— pierde el derecho a la vida eterna, pierde la oportunidad que Dios le dio de vivir eternamente; porque el que no escucha la Voz de Dios no tiene derecho a vivir eternamente.

Por eso es que Cristo dijo: “Mis palabras son espíritu y son vida”1. “Y el que oye mi Palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas pasó de muerte a vida”2.

¿Ven lo importante que es escuchar la Voz de Dios, la Voz de Cristo, la Palabra de Jesucristo?

También está dicho, en una ocasión en que Jesucristo estaba predicando y una mujer se levantó en medio del grupo, de en medio de la congregación, en medio de los oyentes, y dijo: “Bienaventurados los pechos que mamaste”, y Cristo dijo: “Antes bienaventurados los que oyen la Palabra de Dios”3.

Porque ahí está la bienaventuranza, ahí está la bendición de Dios para vida eterna de todos los que escuchan la Voz de Dios, y reciben a Cristo como su Salvador, y lavan sus pecados en la Sangre del Cordero, y reciben el Espíritu de Jesucristo: y nacen de nuevo, conforme a como Cristo dijo que tenía que suceder en la vida de una persona para entrar al Reino de Dios o Reino de los Cielos, para entrar a formar parte de la Iglesia del Señor Jesucristo.

Porque una persona no puede decir: “Yo me voy a unir a la Iglesia del Señor Jesucristo”. Eso no funciona. La persona tiene que nacer en la Iglesia del Señor Jesucristo del Agua y del Espíritu.

Así como para usted pertenecer a la familia que pertenece, usted tuvo que nacer en esa familia a través de su papá y de su mamá; y así, para pertenecer a la Familia de Dios, a los hijos e hijas de Dios, a la Casa de Dios, usted tiene que nacer de nuevo del Agua y del Espíritu, usted tiene que creer la predicación del Evangelio y recibir a Cristo como su Salvador, y lavar sus pecados en la Sangre de Jesucristo, y recibir Su Espíritu Santo; y así es como usted entra a la Casa de Dios, a la Familia de Dios, para ser manifestado como un hijo o una hija de Dios en el Reino de Dios, en la Casa de Dios, en la Iglesia del Señor Jesucristo.

Ahora, hemos visto este misterio de cómo la persona entra a la Casa de Dios, a la Iglesia del Señor Jesucristo.

El salmista David decía que su deseo era estar en la Casa de Dios todos los días de su vida4, y él decía que deseaba estar en los atrios de la Casa de Dios5; y ahora, vean ustedes, él perteneció a la etapa del Atrio de la Casa de Dios.

Luego, la Iglesia del Señor Jesucristo durante estos dos mil años que han estado transcurriendo, y la Dispensación de la Gracia, la Iglesia del Señor Jesucristo ha estado en el Lugar Santo de la Casa de Dios, del Cuerpo Místico de Cristo; y el deseo para todos los de las siete etapas de la Iglesia gentil durante la Dispensación de la Gracia era estar en la Casa de Dios, en el Lugar Santo.

Pero ahora, el deseo de los escogidos en la Edad de la Piedra Angular era estar en la Casa de Dios, pero en el Lugar Santísimo de la Casa de Dios; y ahí es donde están siendo llamados y juntados todos los escogidos en este Día Postrero, en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino, por nuestro amado Señor Jesucristo en Espíritu Santo por medio de Su Ángel Mensajero, llamando y juntando a Sus escogidos con la Gran Voz de Trompeta, y colocándolos en el Lugar Santísimo de Su Templo espiritual.

Esta es la Obra que se está llevando a cabo en la América Latina y el Caribe, que es el territorio escogido por Dios para —con latinoamericanos y caribeños— llevar a cabo la construcción del Lugar Santísimo de Su Templo espiritual.

Así que la América Latina y el Caribe tiene los escogidos que en el Día Postrero serían llamados y juntados, y colocados en la Edad de la Piedra Angular, en el Lugar Santísimo del Templo espiritual de nuestro amado Señor Jesucristo.

Son los latinoamericanos y caribeños los que estarían escuchando en el Día Postrero la Voz de Jesucristo como una Gran Voz de Trompeta por medio de Su Ángel Mensajero, llamando y juntando a Sus escogidos, y dándoles a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, en este Día Postrero.

Por eso es que en Apocalipsis, capítulo 1, verso 10 al 11, la Voz de Cristo en el Día Postrero, o sea, en el Día del Señor, es escuchada como una Gran Voz de Trompeta. Dice:

“Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor (nos dice San Juan), y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,

que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último”.

¿Quién es el Alfa y Omega?, ¿quién es el primero y el último? Nuestro amado Señor Jesucristo. Es en el Día Postrero, en el Día del Señor, que es el séptimo milenio, en donde la Voz de Cristo es escuchada como una Gran Voz de Trompeta; o sea, la Voz de Cristo es escuchada como el Mensaje del Evangelio del Reino; esa es la Gran Voz de Trompeta. Y el Mensaje del Evangelio del Reino gira alrededor de la Segunda Venida de Cristo como el León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores, en Su Obra de Reclamo.

Es el Evangelio del Reino el que contiene la revelación divina de la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles, llamando y juntando a todos Sus escogidos con Gran Voz de Trompeta en el Día Postrero, en la América Latina y el Caribe, y colocándolos en la Edad de la Piedra Angular y en la Dispensación del Reino.

Por eso, vean ustedes, el llamado de Cristo en el Día Postrero, en el cual nosotros vivimos, es en la Casa de Dios, es en la Iglesia del Señor Jesucristo, en la etapa de la Edad de la Piedra Angular, en la etapa del Lugar Santísimo del Cuerpo Místico de Cristo, de ese Templo espiritual.

Es ahí donde Jesucristo estaría en el Día Postrero, así como Él estuvo en Su Casa, en Su Iglesia, en las edades pasadas, en cada edad, en cada etapa de Su Iglesia; y estuvo manifestado en cada ángel mensajero, haciendo el llamado de cada edad; y por consiguiente se escuchó en cada edad la Voz de Cristo, la Trompeta de Dios para cada edad.

Y ahora EN EL DÍA POSTRERO se escucha la Trompeta Final, esa Gran Voz de Trompeta, la Voz de Cristo por medio de Su Ángel Mensajero en la Edad de la Piedra Angular, llamando y juntando a todos Sus escogidos, y dándoles a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, en este Día Postrero.

Vean que es EN LA CASA DE DIOS que es efectuado el llamado de Cristo, con esa Gran Voz de Trompeta, por medio de Su Ángel Mensajero. Es en la Casa de Dios, en la Iglesia del Señor Jesucristo, en la etapa del Lugar Santísimo, donde Cristo estaría manifestado, donde el Hijo del Hombre con Sus Ángeles estaría manifestado.

Esto es Cristo en Espíritu Santo manifestando el ministerio de Jesús, y manifestando el ministerio de Moisés por segunda vez, y el ministerio de Elías por quinta vez, en Su Ángel Mensajero, en este Día Postrero.

Y por medio de Su Ángel Mensajero: llamando y juntando Sus escogidos con la Gran Voz de Trompeta, o sea, con el Mensaje del Evangelio del Reino; porque la Gran Voz de Trompeta es el Mensaje del Evangelio del Reino.

Es la Trompeta del Evangelio del Reino llamando y juntando a todos Sus escogidos en este Día Postrero, en la América Latina y el Caribe, conforme al Programa Divino señalado para este Día Postrero.

Hemos visto EL MINISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO.

Vean, el ministerio del llamado del Señor Jesucristo y Su Esposa, es el ministerio de Jesucristo en Espíritu Santo a través de Su Ángel Mensajero, en el cual opera el ministerio de Jesús por segunda vez, el ministerio de Moisés por segunda vez y el ministerio de Elías por quinta vez.

Estos son los tres ministerios que estarían manifestados en el Día Postrero, en la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles, para llamar y juntar a Sus escogidos en la Casa de Dios, en la Iglesia del Señor Jesucristo, en el Lugar Santísimo de ese Templo espiritual, que es la Edad de la Piedra Angular; y así es como el llamado de Cristo, del Espíritu Santo, por medio de Su Ángel Mensajero sería escuchado en el Día Postrero.

Y el Espíritu y la Esposa (el Espíritu: por medio de Su Ángel Mensajero; y la Esposa: o sea, la Iglesia del Señor Jesucristo) dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”.

Hay Agua de vida eterna en la Edad de la Piedra Angular, hay Agua de vida eterna en el Lugar Santísimo del Templo espiritual del Señor Jesucristo; así como en la Nueva Jerusalén encontramos que del Trono sale un río de agua limpia, de Agua de Vida. Dice Apocalipsis, capítulo 22, verso 1 en adelante, dice:

“Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero”.

¿De dónde sale el río de Agua de Vida? Del Trono de Dios.

Y ahora, eso se refleja en la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Trono del Señor Jesucristo en Su Iglesia, en Su Templo espiritual; y es de ahí, del Trono del Señor Jesucristo en el Lugar Santísimo de Su Templo espiritual, que sale un río de Agua de vida eterna para todos los escogidos de Dios.

Ahí es donde estaría, en el Día Postrero, Jesucristo en Espíritu Santo dándonos Agua de vida eterna, para así que todo ser humano tenga la oportunidad en este tiempo final de recibir vida eterna también, así como en otras edades pasadas.

Y ahora, estamos en el tiempo más glorioso de todos los tiempos, en el tiempo en que los escogidos de Dios recibirán la plenitud del Espíritu de Dios conforme a la promesa de Cristo.

Ahora, vean ustedes, los escogidos de Dios, cuando creen en Jesucristo como su Salvador, luego reciben Su Espíritu Santo, y así nacen de nuevo, nacen del Agua y del Espíritu; y así entran al Reino de Dios. Y para el Día Postrero recibirán la plenitud del Espíritu de Dios, la cual estará manifestada en el Lugar Santísimo del Templo espiritual de Cristo, pues del Trono de Dios sale un río de Agua de vida eterna; y en el Templo espiritual de Cristo, ahí saldrá un río de Agua de vida eterna, el cual representa el río de Agua de vida eterna que estará en la Nueva Jerusalén.

Ahora, podemos ver cómo en la Edad de la Piedra Angular se refleja todo lo que estará allá en el Trono del Señor Jesucristo en la Nueva Jerusalén, y se refleja todo lo que está en el Trono de Dios en el Cielo.

Y ahora, la Edad del Lugar Santísimo del Templo espiritual de Cristo ha caído en la América Latina y el Caribe, en donde se está construyendo el Lugar Santísimo del Templo espiritual de Cristo con piedras vivas, con seres humanos latinoamericanos y caribeños, que están escritos en el Libro de la Vida del Cordero desde antes de la fundación del mundo; y están predestinados, están ordenados, para formar parte de ese Lugar Santísimo del Templo espiritual del Señor Jesucristo en este Día Postrero.

Por eso es que en este Día Postrero escucharán la Voz del Señor Jesucristo, la Voz del Espíritu Santo, llamándolos y juntándolos; esa Gran Voz de Trompeta bajo el ministerio de Jesucristo por medio de Su Ángel Mensajero, en donde opera los ministerios de Moisés por segunda vez, de Elías por quinta vez y de Jesús por segunda vez.

Y así es como EL MINISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO se efectúa, y se completa el número de los escogidos de Dios, se completa el número de los miembros del Cuerpo Místico del Señor Jesucristo.

Todavía estamos en el llamado de la Gran Voz de Trompeta, porque todavía no se ha completado el número de los escogidos de Dios; pero el llamado sigue llegando a los oídos y corazones de los latinoamericanos y caribeños en este tiempo final, para, los que tienen sus nombres escritos en el Libro de la Vida del Cordero, reciban ese llamado en sus almas y entren al Cuerpo Místico de Cristo, a la Edad de la Piedra Angular y a la Dispensación del Reino; a la Edad del Lugar Santísimo de ese Templo espiritual de Jesucristo, que es Su Iglesia.

Y así EL MINISTERIO, o EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO se efectúa, y es dado a conocer este misterio a los escogidos de Dios en la Edad de la Piedra Angular.

Vean, ¿cuántos sabían…?

• que el llamado del Espíritu y de la Esposa en el Día Postrero sería el llamado del Espíritu Santo por medio de Su Ángel Mensajero en el Día Postrero y en medio de la Esposa del Cordero;

• en donde se estaría extendiendo este llamado, y el Ángel del Señor Jesucristo, con el Espíritu de Cristo, estaría siendo el instrumento de Cristo en el Día Postrero para este llamado;

• y este llamado se extendería por medio de videos, de cintas magnetofónicas y de folletos impresos; y diferentes formas que serían usadas en este Día Postrero, para que este llamado llegue a todos los escogidos de Dios en toda la América Latina y el Caribe. Y si alguno se encuentra fuera del continente latinoamericano y caribeño, pero tiene su nombre escrito en el Libro de la Vida del Cordero, este llamado también les llegue a ellos dondequiera que se encuentren.

Hemos llegado al Día Postrero, hemos llegado al tiempo del llamado del Espíritu Santo y de la Esposa del Cordero.

Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida (de la vida eterna) gratuitamente”.

Esa es la oportunidad que Dios le está dando a todos los latinoamericanos y caribeños en este Día Postrero en el cual nosotros estamos viviendo.

Hemos visto EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y DE LA ESPOSA DEL CORDERO, de la Esposa del Señor Jesucristo; o sea, de la Iglesia del Señor Jesucristo.

¿Dónde? EN LA CASA DE DIOS, EN EL DÍA POSTRERO. Y esto está sucediendo ¿dónde? En la América Latina y el Caribe, en este Día Postrero.

Estamos en el tiempo en que el misterio del llamado del Espíritu Santo, del llamado del Señor Jesucristo y Su Esposa, se está cumpliendo en la Casa de Dios, o sea, en el Cuerpo Místico de Cristo, en la etapa latinoamericana y caribeña, en este Día Postrero.

Ha sido para mí un privilegio muy grande estar con ustedes en esta tarde, dándoles testimonio de: “EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA DESDE SU CASA EN EL DÍA POSTRERO”.

¿Y quiénes escucharían este llamado y responderían y entrarían al Redil del Señor, al Cuerpo Místico de Cristo? ¿Dónde están esas personas? ¡Aquí estamos! Estamos aquí, en la América Latina y el Caribe, respondiendo al llamado de Jesucristo en este Día Postrero, y entrando al Cuerpo Místico de Cristo, a la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino.

Hemos escuchado el llamado de Jesucristo, el llamado del Espíritu Santo por medio de Su Ángel Mensajero. Y ese es el Mensaje, el llamado, que la Iglesia del Señor Jesucristo, en esta Edad de la Piedra Angular, lleva a todos los latinoamericanos y caribeños en este Día Postrero.

Ese es el Mensaje de la Esposa del Señor Jesucristo, de la Iglesia del Señor Jesucristo, en este Día Postrero; porque ese es el Mensaje del Señor Jesucristo en Espíritu Santo por medio de Su Ángel Mensajero, llamando y juntando a todos Sus escogidos en este Día Postrero.

Esa es la Gran Voz de Trompeta, y esa es la Trompeta Final; esa es la Trompeta de Dios, que en el Día Postrero estaría llamando y juntando a todos los escogidos de Dios, para luego venir la resurrección de los muertos en Cristo y luego la transformación de nosotros los que vivimos.

Así que, amados amigos y hermanos, estando en el tiempo del llamado del Señor Jesucristo en el Día Postrero: continuemos escuchando Su Voz.

Y a medida que vamos escuchando Su Voz: todos los misterios del Reino de Dios correspondientes al Día Postrero, que son todas estas cosas que deben suceder en el Día Postrero, serán dadas a conocer, serán abiertas a vosotros; y las irán entendiendo a medida que Cristo —por medio de Su Ángel Mensajero en este Día Postrero— las esté dando a conocer a nosotros en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino, y Edad del Lugar Santísimo del Templo espiritual del Señor Jesucristo.

Estar escuchando la Voz de Jesucristo por medio de Su Ángel Mensajero en este Día Postrero, es estar escuchando la Gran Voz de Trompeta o Trompeta Final que fue prometida para sonar en este Día Postrero, y llamar y juntar a todos los escogidos de Dios. Y eso está sucediendo en la América Latina y el Caribe.

O sea que el llamado está surgiendo en la América Latina y el Caribe, en el idioma latinoamericano y caribeño, que es el español; porque en su mayoría, los latinoamericanos en todas las naciones, hablan el español, exceptuando algunas naciones, como Brasil y algunas otras naciones del Caribe; pero el idioma latinoamericano y caribeño principal es el español. Y en ese idioma la Voz de Jesucristo sería escuchada en este tiempo final, llamando y juntando Sus escogidos.

Esa es la Voz de Cristo, la Gran Voz de Trompeta o Trompeta Final, es la Voz del Esposo, del Espíritu Santo en el Día Postrero en medio de los latinoamericanos y caribeños, dándonos a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, en este Día Postrero, en la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino.

Ha sido para mí una bendición grande estar con ustedes, dándoles testimonio de: “EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO”.

Que Jesucristo desde Su Casa, desde el Lugar Santísimo de Su Casa, nos bendiga a todos con las bendiciones prometidas para este Día Postrero para Sus escogidos; y pronto, todos los escogidos que faltan por llegar a Su Casa, a la Casa de Cristo, oigan la Voz de Cristo llamándolos; y vengan a la Casa de Cristo, a la Iglesia del Señor Jesucristo; y se complete el número de los escogidos de Dios. Y pronto, y muy pronto, todos los escogidos de Dios seamos transformados y llevados a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo, en la Casa de nuestro Padre celestial. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.

Que las bendiciones de Jesucristo sean sobre cada uno de ustedes.

Muchas gracias por vuestra amable atención, y continúen pasando un día o una tarde llena de las bendiciones de Jesucristo.

Para los que estarán en la noche, a las 6:00 de la tarde en el próximo lugar que… a las 7:30 de la tarde en el próximo lugar, allá en el grupo de Cañada Blanca, nos veremos allá nuevamente para continuar escuchando la Voz del Esposo, la Voz del Espíritu Santo en este Día Postrero.

Así que Dios les continúe bendiciendo a todos, Dios les guarde; y con nosotros nuevamente el reverendo Roberto Monsibáez para continuar.

Dios les continúe bendiciendo a todos.

“EL MISTERIO DEL LLAMADO DEL SEÑOR JESUCRISTO Y SU ESPOSA, DESDE SU CASA, EN EL DÍA POSTRERO”.

[Revisión febrero 2022]

1 San Juan 6:63

2 San Juan 5:24

3 San Lucas 11:27-28

4 Salmos 27:4

5 Salmos 84:10

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