Muy buenas noches, amados amigos y hermanos presentes aquí en Calí, Colombia; es para mí una bendición grande y privilegio grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo cristiano alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para lo cual, quiero leer en el libro de Josué, capítulo 3, verso 1 en adelante, 1 al 7, donde dice:
“Josué se levantó de mañana, y él y todos los hijos de Israel partieron de Sitim y vinieron hasta el Jordán, y reposaron allí antes de pasarlo.
Y después de tres días, los oficiales recorrieron el campamento,
y mandaron al pueblo, diciendo: Cuando veáis el arca del pacto de Jehová vuestro Dios, y los levitas sacerdotes que la llevan, vosotros saldréis de vuestro lugar y marcharéis en pos de ella,
a fin de que sepáis el camino por donde habéis de ir; por cuanto vosotros no habéis pasado antes de ahora por este camino. Pero entre vosotros y ella haya distancia como de dos mil codos; no os acercaréis a ella.
Y Josué dijo al pueblo: Santificaos, porque Jehová hará mañana maravillas entre vosotros.
Y habló Josué a los sacerdotes, diciendo: Tomad el arca del pacto, y pasad delante del pueblo. Y ellos tomaron el arca del pacto y fueron delante del pueblo.
Entonces Jehová dijo a Josué: Desde este día comenzaré a engrandecerte delante de los ojos de todo Israel, para que entiendan que como estuve con Moisés, así estaré contigo.”
Nuestro tema para esta ocasión es: “EL PUEBLO QUE SIGUE EL ARCA.”
En esta noche deseamos ver cuál es el pueblo que sigue el Arca.
Que las bendiciones de Jesucristo, el Angel del Pacto, contenidas en el Arca del Pacto, sean sobre todos ustedes y sobre mí también, y nos abra las Escrituras y nos permita ver, entender, cómo seguir el Arca del Pacto en este tiempo final. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.
Es muy importante saber cómo seguir el Arca del Pacto. Aquí Dios le dice a Josué, para que le diga al pueblo, que sigan el arca del pacto, porque ellos no conocen el camino, porque ellos no han caminado por ese camino antes.
Y ahora, ¿quién es el que conoce el camino? Dios. El Angel del Pacto y el Arca del Pacto, que es el Arca de Dios, donde está el Angel del Pacto, va guiándoles el camino.
Y ahora, para comprender en el Nuevo Testamento cómo seguir el Arca del Pacto, necesitamos comprender que el pueblo hebreo siendo el Israel terrenal, la casa de Israel, la familia de Israel, los descendientes de Israel, o sea, de Jacob, siendo una casa como pueblo ellos tenían que seguir el arca del pacto a través de su recorrido desde Egipto hasta la tierra prometida; el arca del pacto iría delante de ellos para cruzar el Jordán, el pueblo hebreo en seco, o sea, el Jordán en seco; o sea, Dios abriría el Jordán como había abierto el mar rojo para que Su pueblo pasase en seco. Como hizo con Moisés ahora estaba haciendo a través de Josué, para que el pueblo supiera que como Dios estuvo con Moisés, estaba con Josué. Josué significa “Salvador” o “Redentor”; y ese fue el nombre que le colocó Moisés a su servidor Oseas hijo de Num.
Encontramos que Josué es Jesús. O sea, Josué significa: Salvador o Redentor y Jesús significa: Salvador o Redentor. Josué en el idioma de los hebreos es el mismo nombre Jesús, pero traducido a nuestro idioma Josué es Jesús. O sea, que un hombre en el Antiguo Testamento que llevó al pueblo hebreo a la tierra prometida, pasó en seco el Jordán con el pueblo, lo llevó a la tierra prometida; el Jordán representa muerte.
Y ahora Josué siendo tipo y figura de Cristo, es Josué en quien allí se está reflejando Cristo, el cual nos pasa en seco a la tierra prometida del bautismo del Espíritu Santo; o sea, estando vivos, sin ver muerte, es que obtenemos el bautismo del Espíritu Santo, o sea, la tierra prometida del bautismo del Espíritu Santo.
Y para el Día Postrero los que estarán siguiendo el Arca del Pacto bajo el ministerio de nuestro Josué… y Josué es Cristo, Josué tipifica, representa, el Espíritu Santo, y en el Día Postrero el Espíritu Santo estará guiando a Su Pueblo y estará llevándolo a la tierra prometida. Por eso el Rvdo. William Branham dijo que el Espíritu Santo llevaría a Su Iglesia a la tierra prometida, la tierra prometida del nuevo cuerpo y la Tierra prometida del glorioso Reino Milenial, y El es el que también nos lleva a la Cena de las Bodas del Cordero. Todas estas bendiciones son para aquellos que estarán siguiendo el Arca del Pacto.
Y ahora, en el Antiguo Testamento, en el Israel terrenal, la casa de Israel, el pueblo hebreo compuesto por los descendientes de las 12 tribus de Israel, encontramos que son, como nación terrenal, el Pueblo de Dios, en el cual se ha reflejado el Programa Divino que Dios llevaría a cabo con el Israel Celestial, con el Israel Celestial que es la Iglesia del Señor Jesucristo.
Siendo que el pueblo hebreo como nación es la Casa de Dios (como nación), ahora la Casa de Dios como Templo Espiritual y como Familia de Dios, descendientes de Dios, son nada menos que los escogidos de Dios, los miembros de la Iglesia del Señor Jesucristo. Por eso es que San Pablo nos enseña que Dios está construyendo una Casa.
Y ahora, así como Moisés construyó un templo o tabernáculo para Dios, ahora Cristo está construyendo una Casa, y esa Casa es la Familia de Dios, es llamada la Iglesia del Señor Jesucristo en el Nuevo Testamento. Dice San Pablo en el capítulo 2 de su carta a los Efesios, verso 19 al 22:
“Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios (¿Miembros de qué familia somos nosotros? De la Familia de Dios. Y ese es un privilegio que no toda persona tiene, de ser miembro de la Familia de Dios);
edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,
en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor (o sea, que está siendo construido un Nuevo templo); en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.”
Dios mora en Espíritu Santo en ese Templo Espiritual, y en cada miembro de ese Templo Espiritual mora en Espíritu Santo en las primicias del espíritu; y en adición en el Día Postrero morará en toda Su plenitud en Su Iglesia como Cuerpo Místico de creyentes y también en cada miembro de la Iglesia de Jesucristo como individuo. Cuando los muertos en Cristo sean resucitados en cuerpos eternos y nosotros los que vivimos seamos transformados, entonces Dios estará en cada uno de nosotros en toda Su plenitud; y eso es la doble porción; y así es como tendremos como individuos la doble porción.
Tenemos la primera porción, las primicias del espíritu, en donde obtuvimos el nuevo nacimiento al recibir el Espíritu Santo, luego de haber creído en Cristo como nuestro Salvador y haber lavado nuestros pecados en la Sangre de Cristo, y haber sido bautizados en Su Nombre, para así recibir el Espíritu Santo y obtener el nuevo nacimiento, porque el que no nazca de nuevo no puede ver (o sea, no puede entender) el Reino de Dios. El que no nazca del Agua y del Espíritu no puede entrar al Reino de Dios, no puede entrar al Templo Espiritual de Cristo, no puede entrar a la Familia de Dios.
Así como usted para pertenecer a la familia terrenal a la cual pertenece tuvo que nacer, y para usted pertenecer a la Familia de Dios, la descendencia de Dios, usted tiene que nacer de nuevo, nacer en la Familia de Dios, en la Iglesia del Señor Jesucristo por medio del nuevo nacimiento. Y por cuanto en todo nacimiento encontramos que un cuerpo ha nacido, en el nuevo nacimiento obtenemos el cuerpo teofánico de la sexta dimensión y esa es la imagen de Dios, la imagen de Dios, el cuerpo teofánico; y así es como venimos a ser a imagen de Dios.
Dios tiene Su cuerpo teofánico de la sexta dimensión llamado el Angel de Jehová o Angel del Pacto, en el cual apareció a los santos del Antiguo Testamento, los patriarcas (incluyendo al patriarca Abraham). Y en ese Angel del Pacto estaba el Nombre de Dios. Por eso es que en Levítico, capítulo 23, verso… Exodo, capítulo 23… —corrijo— Exodo, capítulo 23, verso 20 en adelante, dice:
“He aquí yo envío mi Angel delante de ti para que te guarde en el camino, y te introduzca en el lugar que yo he preparado.
Guárdate delante de él, y oye su voz; no le seas rebelde; porque él no perdonará vuestra rebelión, porque mi nombre está en él.
Pero si en verdad oyeres su voz e hicieres todo lo que yo te dijere, seré enemigo de tus enemigos, y afligiré a los que te afligieren.
Porque mi Angel irá delante de ti, y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a los cuales yo haré destruir.”
Y ahora, vean dónde está el Nombre de Dios: en Su Angel, el Angel del Pacto, que es el cuerpo teofánico de Dios. Y Dios en ese cuerpo teofánico es un hombre de la sexta dimensión llamado el Angel del Pacto o Angel de Jehová, el cual le apareció a Moisés en una llama de fuego, y Moisés quiso saber cuál era Su Nombre y le dio las cuatro consonantes YHWH; Moisés escuchó la pronunciación.
Y ahora, vean ustedes quién llevaba el Nombre de Dios: El Angel del Pacto que estaba guiando al pueblo hebreo, y eso era Dios manifestado en medio del pueblo hebreo para la liberación del pueblo hebreo. Ese mismo Angel del Pacto le apareció a diferentes profetas en el Antiguo Testamento, y luego cuando llegó el tiempo para El venir en carne humana, las profecías anunciaron. Por ejemplo a través del profeta Isaías, capítulo 7, verso 14:
“He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel —que traducido es Dios con nosotros.—”
Dios vendría a la Tierra a habitar en medio de los seres humanos como un ser humano, y eso sería el Verbo que era con Dios y era Dios, el cual se haría carne y viviría en medio del pueblo hebreo:
“Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.” Les he citado de San Juan, capítulo 1, verso 1 al 18.
Y ahora, por medio de esa manifestación en carne Dios se reveló al pueblo hebreo. “Porque a Dios nadie jamás le vio, pero el Unigénito hijo que está en el seno del Padre El le declaró.” Capítulo 1, verso 18 de San Juan.
Y ahora, las palabras del profeta Malaquías dichas en el capítulo 3, se estaban cumpliendo. Vean lo que había dicho en el capítulo 3, verso 1 en adelante, dice:
“He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí (¿Ese mensajero fue quién? Juan el Bautista, precursor de la Primera Venida de Cristo); y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos.”
¿Quién vendría? El Angel del Pacto, el Señor Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. ¿Y cómo vendría? Después de Juan el Bautista El vendría en carne humana para manifestarse como el Cordero de Dios y quitar el pecado del mundo, era nada menos que el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob con Su cuerpo teofánico llamado el Angel del Pacto dentro de un cuerpo de carne llamado Jesús; ese era el Misterio que estaba manifestado allí en la persona de Jesús.
“Grande es el misterio de la piedad; Dios ha sido manifestado en carne.” Dice San Pablo en Primera de Timoteo, capítulo 3, verso 15 al 16.
Y ahora, esta manifestación del Angel del Pacto fue tan grande que cegó a las personas del pueblo hebreo, pero le abrió los ojos a otras personas; a los que decían saber mucho los cegó, a los que no sabían nada les abrió los ojos para ver.
Y ahora, cuando molestan mucho a Jesús, en una ocasión, miren lo que Jesús dice en el capítulo 8, de San Juan (ya sabemos que es el Verbo hecho carne), versos 56 en adelante, dice:
“Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó.
Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham? (entonces Jesús contesta a ellos de la siguiente manera:).
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.
(Y cuando dice eso:) tomaron entonces piedras para arrojárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo y atravesando por en medio de ellos, se fue.”
La promesa de la Venida del Mesías era la promesa de la Venida del Angel del Pacto, del Angel de Jehová, del mismo Dios con Su cuerpo teofánico, cuerpo angelical, dentro de un cuerpo de carne y esa promesa se cumplió en la persona de Jesús de Nazaret nacido en Belén de Judea. El Angel del Pacto se hizo hombre, se hizo carne y habitó en medio del pueblo hebreo; pero Abraham lo había visto antes y había comido con El, el día antes de la destrucción de Sodoma y de Gomorra.
Y ahora, no solamente Jesús en Su cuerpo teofánico conocido como el Angel del Pacto se materializó allá, también los arcángeles Gabriel y Miguel, pues Dios les creó un cuerpo temporal allí para ellos y otro para El mismo, para poder comer con ellos, porque un espíritu no puede comer, pero si se materializa entonces puede comer.
Y ahora, están allí, el día antes de la destrucción de Sodoma y Gomorra, materializados: el Angel del Pacto, Elohim, el Angel de Jehová y también los ángeles Gabriel y Miguel.
Para el Día Postrero antes de la destrucción del reino de los gentiles, la promesa es que el Hijo del Hombre vendrá con Sus ángeles; eso es la promesa de la Venida de Elohim con Sus arcángeles Gabriel y Miguel.
Y ahora, para el Día Postrero los arcángeles Gabriel y Miguel estarán llevando a cabo una labor muy importante en el Programa Divino. Por eso el arcángel Gabriel le dice al profeta Daniel, en el capítulo 12, verso 1 en adelante:
“En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo (de los hijos de Israel).”
Y en el capítulo 12 del Apocalipsis también encontramos una lucha en el Cielo en donde el arcángel Miguel pelea, lucha, contra satanás y lo derrota.
Y ahora, podemos ver que desde otra dimensión, de parte de Dios, Celestial, hay ayuda para el Israel Celestial y para el Israel terrenal; si el arcángel Miguel está de parte de los hijos de Israel, si para el Israel terrenal es así, cómo será para el Israel Celestial.
Ahora, el Rvdo. William Branham hablándonos acerca del arcángel… de estos arcángeles, miren lo que nos dice… recordemos que las luchas que comenzaron en el Cielo, la batalla que comenzó en el Cielo ha continuado en la Tierra. En la página 9, párrafo 73, del “Libro de Citas,” que contiene un extracto del Mensaje: “Principio y fin de la dispensación gentil.” Dice:
“Y en aquel tiempo Miguel estará de pie, el gran príncipe, Miguel era Cristo, desde luego, que peleó las guerras angelicales en el Cielo con el diablo (o contra el diablo). Satán y Miguel pelearon en contra uno del otro y ahora… y ese tiempo El dijo cuando fueron hallados escritos en el Libro, fueron libertados.”
En el Libro de la Vida, cuando son hallados escritos son libertados, o sea, que el arcángel Miguel estará en el tiempo final o Día Postrero en pie para así que los que están escritos en el Libro sean libertados.
Recuerdan cuando el Rvdo. William Branham dijo en un sueño o visión y luego lo dio a conocer, dijo que Dios estaba libertando a Su Pueblo y profetizó que eso sucederá; y esa batalla y luego la victoria, todo eso es en el Amor Divino, y esa es la gran victoria en el Amor Divino que obtendrá Cristo con Su Iglesia y para Su Iglesia.
Y ahora, podemos ver aquí este misterio; podemos ver que para este tiempo los arcángeles Gabriel y Miguel estarán presentes.
En la página 33, párrafo 282 del “Libro de Citas,” que contiene un extracto del Mensaje: “La creencia de María.” Dice (predicado en el 1960):
“Y parado allí estaba un ángel: El poderoso Gabriel. El es un mensajero a los Judíos. Recuerden Gabriel anunció la Primera Venida de Cristo, el ángel Gabriel anunciará la Segunda Venida de Cristo.” Eso lo dice el precursor de la Segunda Venida de Cristo.
Y ahora, conscientes de que todo esto prometido para el Día Postrero para los hijos de Dios, estará sucediendo en la Iglesia de Jesucristo, y luego toda la bendición pasará al pueblo hebreo, tenemos que estar siguiendo ¿qué? El Arca del Pacto.
Es importante seguir el Arca del Pacto, porque el Arca del Pacto nos guía. Siguiendo al Arca del Pacto estamos siguiendo al Angel del Pacto, porque el Angel del Pacto está en el Arca del Pacto.
Y ahora, veamos lo que dice el Rvdo. William Branham con relación al Arca del Pacto. Hemos visto que Dios está construyendo, creando, una Casa, o sea, una Familia; cuando se dice una Casa, la Casa de Dios, es la Familia de Dios.
Y ahora, la Casa de Dios es la Iglesia del Señor Jesucristo, esa es la Casa Celestial, la Familia Celestial, y todo lo que Dios estará haciendo o estaría haciendo en Su Casa y en la creación de Su Casa; porque es por Creación Divina que El está construyendo Su Casa, o sea, Su Familia. Por medio del nuevo nacimiento la persona nace en la Casa de Dios y viene a ser un miembro del Cuerpo Místico de Cristo, de la Familia de Dios, viene a estar manifestado como un hijo o una hija de Dios en la Casa de Dios, en la Iglesia de Jesucristo.
El apóstol San Pablo nos dice en Hebreos, capítulo 3, verso 5 al 6, (para no leer mucho…). Dice:
“Y Moisés a la verdad fue fiel en toda la casa de Dios, como siervo, para testimonio de lo que se iba a decir;
pero Cristo como hijo sobre su casa, la cual casa somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin la confianza y el gloriarnos en la esperanza.”
Y ahora, podemos ver que la Casa de Dios ya no es el tabernáculo que construyó Moisés, ya ese no está; ni el templo que construyó Salomón, porque ya ese no está; todo vino a ser un reflejo, un tipo y figura, de la Iglesia del Señor Jesucristo. Y Cristo está construyendo por Creación Divina Su Casa, o sea, Su Familia.
Así como la raza humana por medio de la unión de un hombre y de una mujer se multiplica, se reproduce; ahora por medio de Creación Divina por la predicación del Evangelio y las personas recibiendo a Cristo como Su Salvador, lavando sus pecados en la Sangre de Cristo, siendo bautizados en Su Nombre y recibiendo Su Espíritu Santo, nacen en la Casa de Dios, nacen en la Familia de Dios, y así se reproduce la Familia de Dios, así va creciendo la Familia de Dios, la Casa de Dios.
Y ahora, así como estuvo en medio del pueblo hebreo el arca del pacto, así como estuvo en medio del pueblo hebreo, en medio de la casa de Dios terrenal, el pueblo hebreo, encontramos que el Arca del Pacto estaría en la Casa Celestial de Dios que es la Iglesia de Jesucristo, y los miembros de la Familia de Dios son llamados a seguir el Arca del Pacto. El Arca del Pacto es Cristo. Y el Rvdo. William Branham hablándonos del Arca del Pacto, nos dice en el Mensaje: “Tratando de hacer servicio a Dios fuera de Su voluntad,” nos dice, en la página 83, 84 y 85, dice:
“Cristo es nuestra Arca, la Palabra. Ellos quisieron su denominación. El no puede ser llevado en carros nuevos denominacionales, Su Mensaje no puede ir en el carro de una nueva denominación cuando El está supuesto a estar contenido y venir en el corazón de un Profeta. El lo prometió, así sería, y ésa es la forma en que debe ser.”
Luego aquí en la página 85, nos dice:
“Hay una sola Arca, ese es Jesucristo ¡y El es la Palabra!.
Noten, Dios le dijo al Profeta (eso fue en el Antiguo Testamento)… Dios le dijo al Profeta: ‘come el rollo’ (eso está por Ezequiel)… El le dijo al Profeta: ‘come el rollo’ (en el Antiguo Testamento, o sea:) en el viejo testamento. Al Profeta del Nuevo Testamento, El le dijo: ‘come el Librito’ (eso es Apocalipsis, capítulo 10, verso 8 al 11).”
¿Por qué? ¿Para qué le dio el Librito y le dijo come el Libro o el librito? ¿Para qué Cristo, el Angel del Pacto, le dio el Librito de los Siete Sellos abierto al hombre, al Profeta representado allí en Juan el apóstol? Dice:
“El le dijo: ‘Come el Librito.’ ¿Por qué? ¡Para que el Profeta y la Palabra fueran uno! ¿Ve? Ese es el Arca, la Palabra de Dios.”
Y ahora, donde esté ese Título de Propiedad, allí estará Cristo, el Angel del Pacto, el Arca del Pacto.
De etapa en etapa, vean ustedes, lo que ha estado sucediendo: así como cuando construyó Moisés el tabernáculo y como sucedió también cuando Salomón construyó el templo, el arca del pacto fue traída al templo, pasó por el atrio, pasó por el lugar santo y llegó hasta el lugar santísimo y allí fue colocada el arca del pacto.
¿Cómo Dios dijo a Moisés que tenía que ser llevada el Arca del Pacto de un lugar a otro? Cargada en los hombros de los sacerdotes, sacerdotes descendientes de Leví por la linea de Su hijo Coat.
Y ahora, no eran todos los levitas, sino de los descendientes de Coat y de la linea de Aarón; y Aarón era el que tenía el sumo sacerdocio, tipo del Sumo Sacerdocio de Melquisedec, del Sacerdocio Celestial que es el Sacerdocio de Jesucristo en el Cielo.
Y ahora, los descendientes de Aarón vendrían a ser también sumos sacerdotes, cuando moría un sumo sacerdote, vean, era de la descendencia de Aarón, y venía a un nuevo sumo sacerdote de la descendencia de Aarón también.
Y ahora, Cristo es el Sumo Sacerdote Melquisedec del Templo Celestial, y nosotros somos de ese Orden Sacerdotal, y de ese Orden Sacerdotal es que están los sacerdotes que cargaban el arca del pacto. Pero el arca del pacto cuando iba a ser trasladada de un lugar a otro, quienes podían tomarla y empacarla eran el sumo sacerdote y los descendientes de Aarón, sacerdotes también. Ellos la cubrían con el velo del templo, el velo del Lugar Santísimo y luego con la cubierta que estaba sobre el Lugar Santísimo, así era preparada el arca del pacto cuando iban a llevarla, a moverla, de un sitio a otro, cuando estaba mudando de un lugar a otro el tabernáculo.
Cualquier persona que tocase el arca del pacto moriría; solamente la podían tocar el sumo sacerdote y los sacerdotes de la linea de Aarón descendientes de Coat, ellos eran los que podían bregar con el arca del pacto.
Y ahora, ni siquiera podían mirar dentro del arca del pacto los sacerdotes, y allí lo que estaba era la Palabra, las tablas de la ley, la vara de Aarón que reverdeció y el maná en una urna de oro.
Y ahora, el arca del pacto que desapareció, ¿ahora la encontramos dónde? En la Casa de Dios en medio del Israel Celestial, en la Iglesia del Señor Jesucristo. Porque el arca del pacto allá, representa a Cristo, Cristo, el Angel del Pacto, y el Nuevo Pacto está en Cristo.
Y ahora el Arca del Pacto está en medio de Su Iglesia, y de etapa en etapa, de edad en edad, ha estado moviéndose de etapa en etapa, y encontramos de edad en edad a los ángeles mensajeros de cada edad, al ángel mensajero de cada edad, trayendo a Su edad el Arca del Pacto en su corazón; viene contenido en el corazón del ángel mensajero de cada edad. Pero el Arca del Pacto ni se puede quedar en el Atrio, ni se puede quedar en el Lugar Santo, tiene que seguir su trayectoria hasta entrar al Lugar Santísimo. Cristo, la Palabra, tiene que pasar hasta el Lugar Santísimo en el Cuerpo Místico de Cristo.
Y ahora, podemos ver la historia de la trayectoria del Arca del Pacto en la Casa de Dios, la Iglesia de Jesucristo, de edad en edad: vino de edad en edad contenida en el corazón de un hombre, del Mensajero de cada edad; no vino en un carro nuevo, no vino en una denominación, sino en un Mensajero de Dios; esos son los siete espíritus de Dios que recorren toda la Tierra, los siete ángeles mensajeros de las siete edades de la Iglesia de Jesucristo donde estuvo un espíritu teofánico manifestado en carne humana, velado en carne humana, trayendo la Palabra para cada edad; son también las siete lámparas de fuego y son también los siete ojos que el Cordero tiene en Sus siete cuernos, y los siete cuernos son las siete edades.
Y ahora, con esa manifestación de los siete espíritus de Dios en las siete edades, que es la manifestación del Espíritu Santo en estos siete mensajeros trayendo el Arca del Pacto de edad en edad, encontramos que los que siguieron el Arca del Pacto en la edad que les tocó vivir, fueron los que escucharon la Voz de Cristo, la Voz del Espíritu Santo; porque el que tiene oído oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
Y el espíritu habló por medio de cada ángel mensajero de cada edad, y los que siguieron a Cristo manifestado en el Angel mensajero de cada edad, estaban siguiendo al Arca del Pacto, porque Cristo, el Arca del Pacto, estaba velado en el mensajero de cada edad en la porción correspondiente a cada edad.
Pero el Arca del Pacto no se puede quedar ni en el Atrio, ni en el Lugar Santo; hay un lugar donde el Arca del Pacto tiene que ser colocada; cada mensajero la colocó en la edad que le tocó vivir; edad que fue creada por Cristo en la manifestación de Cristo en el mensajero de cada edad.
Y ahora, para que el Arca del Pacto pueda estar en este tiempo final en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo, tiene que ser creado el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo con piedras vivas. Vean lo que San Pedro nos dice en su carta… Primera de Pedro, capítulo 2, verso 4 en adelante, dice:
“Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa,
vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales y aceptables a Dios por medio de Jesucristo.”
Y ahora nosotros como piedras vivas somos edificados una Casa, o sea, que Cristo está edificando una Casa, un Templo Espiritual, que es Su Iglesia, una Familia que es la Familia de Dios, la Casa de Dios para morada de Dios en Espíritu Santo en Su Familia, Su Casa.
Así como Cristo es la Piedra que los edificadores desecharon, esa Piedra Viva, esa Piedra viva, ese hombre; así también nosotros somos piedras vivas, piedras vivientes, seres humanos con los cuales Cristo está edificando la parte de la Casa de Dios correspondiente a este tiempo final.
“Por lo cual también contiene la Escritura:
He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa;
Y el que creyere en él, no será avergonzado.
Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen,
La piedra que los edificadores desecharon,
Ha venido a ser la cabeza del ángulo;
y:
Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados.
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.”
Y ahora, en la Casa de Dios que está siendo construida por Cristo, la Casa de Dios, la Familia de Dios, ese Templo Espiritual, con piedras vivas, con seres humanos vivos en cada edad El está colocando en Su Iglesia esas piedras vivas; y a medida que va llamando y juntando a Sus escogidos en cada edad, se va formando la parte del Templo Espiritual de Cristo correspondiente a cada edad.
Y ahora, cuando han transcurrido ya las siete edades de la Iglesia, pues ya el Lugar Santo del Templo Espiritual de Cristo ha sido construido; pero un templo sin lugar santísimo no es un templo para Dios; como este lugar, si no tiene esta parte aquí, para la predicación de la Palabra, pues no es llamado un templo.
Y ahora, si Moisés construía el tabernáculo y no le hacía el lugar santísimo, ¿dónde iba a colocar el arca del pacto? Porque el lugar final de morada para el Arca el Pacto, ¿cuál es? El Lugar Santísimo. Y es un lugar donde no hay luz; en el lugar santo estaban las luces de los siete candeleros encendidos en el candelabro, pero en el Lugar Santísimo no hay luz, ¿por qué? Porque allí la luz de la Shekinah, de la Presencia de Dios, estaría sobre el arca del pacto, sobre el propiciatorio en medio de los dos querubines de oro. Y luego en el lugar o en el tabernáculo que construyó… o templo que construyó el rey Salomón, el arca del pacto fue colocada bajo las alas de los dos querubines de madera de olivo cubiertos de oro.
Y ahí Dios nos da más Luz de lo que El hará en Su Iglesia en el Día Postrero, porque la etapa final de la Iglesia de Jesucristo es la etapa del Lugar Santísimo, que es la etapa de la Edad de la Piedra Angular.
Y ahora, Dios construye con seres humanos, piedras vivas, latinoamericanos y caribeños, el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual. La Edad de la Piedra Angular es la Edad del Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo.
¿Y cómo tiene que entrar al Lugar Santísimo el Arca del Pacto? Contenida en el corazón de un Profeta. Porque toda revelación tiene que venir por medio de un Profeta, la Palabra viene al Profeta: “Porque no hará nada el Señor Jehová sin que antes revele Sus secretos a Sus siervos Sus profetas.”
Y así como hubo un solo mensajero en cada edad; porque Dios no tiene dos mensajeros para una misma edad, solamente uno es el mensajero de cada edad, uno para cada edad; y para la Edad de la Piedra Angular solamente habrá un Mensajero. Y así como estuvo Cristo, el Angel del Pacto, manifestado en cada mensajero de cada edad llevando a cabo Su Obra de creación, creando Su Iglesia, Su Familia, porque Cristo ha estado reproduciéndose en hijos e hijas de Dios; ese es el misterio de la reproducción de Cristo: para así ser por creación divina la Familia Celestial. Primero obtenemos el cuerpo teofánico en el nuevo nacimiento, y en el Día Postrero en adición obtendremos el cuerpo físico, eterno, inmortal y glorificado; o sea, que la parte física viene en esa segunda fase del Programa de creación.
¿Y quiénes han sido los que han obtenido el nuevo nacimiento y han obtenido el cuerpo teofánico de la sexta dimensión? Los que han seguido el Arca del Pacto en la edad que les ha tocado vivir. Así es para nuestro tiempo.
¿Y quiénes serán los que recibirán el cuerpo eterno, inmortal e incorruptible y glorificado? Los que en edades pasadas siguieron el Arca del Pacto en la edad que les tocó vivir, y los que en este tiempo estarán siguiendo el Arca del Pacto en este tiempo final. [La congregación aplaude – Editor].
Y el Arca del Pacto en este tiempo final llega a Su lugar de reposo que es la Edad del Lugar Santísimo, la Edad de la Piedra Angular. Por eso ahí es donde la Adopción se llevará a cabo, de todos los hijos e hijas de Dios. Por eso es que ahí en la Edad de la Piedra Angular es que se llevará a cabo la resurrección de los muertos en Cristo y la transformación de nosotros los que vivimos.
Cualquier persona puede pensar: “No puede ser.” Bueno, no pudo ser en las edades pasadas la Adopción, ¿por qué? Porque sería para la Edad de la Piedra Angular.
Y ahora, así como sucedió en las edades pasadas, en nuestro tiempo también sucede, pero en una escala mayor. En aquellos tiempos pasados, cada vez que Dios enviaba el ángel mensajero para cada edad, la revelación de la Palabra venía al corazón del mensajero, así venía el Arca del Pacto al corazón del mensajero de cada edad.
Y miren lo que dice el mensajero, el Rvdo. William Branham, el mensajero de la séptima edad de la Iglesia. Página 227 del “Libro de las Edades,” en español, el libro de las Edades que está editado, dice:
“El mensaje a cada edad individual, tiene un incentivo para el creyente, animándole a ser un vencedor y así ser recompensado por el Señor.”
Quizás hay personas que digan: “A mí no me interesa ninguna recompensa, ni me interesa que Cristo me de ningún premio.” Bueno, Cristo es el que lo promete. Pero nosotros somos bien agradecidos a Cristo y decimos: “Gracias por esa recompensa que Tu nos vas a dar.” Y si alguno dice: “A mí no me interesa.” Pues a mí si me interesa. Que Cristo me la dé a mí, la que usted no quiere.
Nosotros trabajamos por Amor a Cristo, pero El dice que recompensará a cada uno según sea su obra. Apocalipsis, capítulo 22, nos dice, el mismo Cristo hablándonos dice, verso 12:
“He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.”
Es importante hacer las obras de acuerdo a la Palabra de Dios y a la Edad y Dispensación que nos ha tocado a nosotros vivir; no trabajamos en una edad pasada, trabajamos en la edad que nos ha tocado vivir; otros trabajaron en otras edades, pues fueron los obreros de otras edades.
Y ahora, a nosotros nos ha tocado trabajar en la Edad de la Piedra Angular, en este entrelace dispensacional donde se entrelaza la Dispensación del Reino con la Dispensación de la Gracia. Y por la Dispensación del Reino que es la Séptima Dispensación de las siete dispensaciones que hay, nadie ha caminado por ese camino, por eso es tan importante seguir el Arca del Pacto.
¿Y cómo vamos a seguir el Arca del Pacto? Bueno consiga dónde está el Arca del Pacto, y siga el Arca del Pacto, donde está el Arca del Pacto. No hay otra forma para poder seguir el Arca del Pacto.
Y ahora, nosotros nos encontramos en el tiempo en donde estamos trabajando en la Obra de Cristo, no en una edad que ya pasó, sino en la edad del presente que es la Edad de la Piedra Angular y en el territorio del presente también: la América Latina y el caribe. Y si alguno se ha ido a otra nación o a otro continente, hasta allá le llega el Mensaje si es parte del Cuerpo Místico de Cristo de la Edad de la Piedra Angular. Cristo recompensará a cada uno según sea su Obra, a los de cada edad, y para el Día Postrero Cristo en San Mateo, capítulo 16, versos 26 al 28, dice que el Hijo del Hombre vendrá con sus ángeles y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras, según sean sus obras.
Por eso es que Cristo dice: “¿De qué le vale al hombre si ganare todo el mundo y pierde su alma?” Porque el Hijo del Hombre vendrá con sus ángeles y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.
El que en la vida terrenal, en sus negocios terrenales, se convierte en un millonario, esos son negocios terrenales, pero esos no son los negocios de nuestro amado Señor Jesucristo, esos no son los negocios del Reino de Dios; por lo tanto no tienen ninguna recompensa. ¿De qué le vale haber ganado todo el mundo, haberse convertido en un multimillonario y perder su alma? De nada le sirvió venir a este planeta Tierra y vivir aquí. Fue una persona que le privó a su alma el derecho a la vida eterna; pensó que solamente la vida terrenal era la vida y no supo que después de esta vida terrenal es que viene lo eterno. Por eso San Pablo y San Pedro, nos dice que no nos podemos conformar a lo terrenal, a lo temporal.
Y ahora, nosotros viviendo en este tiempo y estando en la Edad de la Piedra Angular que es la etapa principal de la Iglesia de Jesucristo, es la etapa que corona a la Iglesia de Jesucristo y es la etapa que corresponde al Lugar Santísimo de Su Templo. Por lo tanto, ¿dónde estaría el Arca del Pacto en este tiempo final? En el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual. Y para ser colocada ahí, pues Cristo construye ese Lugar Santísimo y Cristo trae el Arca del Pacto en el corazón del Mensajero del Lugar Santísimo, el Mensajero de la Edad de la Piedra Angular.
En el lugar santísimo solamente podía ministrar una sola persona: el sumo sacerdote. Por lo tanto el Ministerio que Cristo estará operando en el Día Postrero en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad de la Piedra Angular es un Ministerio de Sumo Sacerdocio, por eso será un Ministerio de Profeta Dispensacional; y solamente el sumo sacerdote era el único que podía ministrar; los que trataron de ministrar en el lugar santísimo, en el capítulo 10, de Levitico, y el capítulo 16 de Levitico y ofrecieron fuego extraño, murieron (aunque eran hijos de Aarón).
También dice el Rvdo. William Branham que los que trataron de imitar a Moisés, murieron. Datán y Coré y todo el séquito de Abiram, todos ellos, vean ustedes, tuvieron problemas delante de Dios. Y es muerte espiritual imitar. Por eso es que el Rvdo. William Branham dijo que lo que estaría sucediendo bajo el Séptimo Sello el diablo no lo podía imitar, porque no sabía lo que era.
El Ministerio para el Día Postrero es el Ministerio más grande correspondiente a la Iglesia de Jesucristo, y toda revelación así como vino en cada edad en y a través del Mensajero de cada edad, en la Edad de la Piedra Angular solamente podrá venir por medio de un Profeta. Por eso es que para el Día Postrero Cristo tendrá a Su Angel Mensajero, del cual el Rvdo. William Branham dijo que ese es un espíritu de Profeta, el cual le reveló a Juan el apóstol todo ese libro del Apocalipsis en esas visiones con esos símbolos, pero esos símbolos tienen un significado; un espíritu de Profeta, eso es un cuerpo teofánico de la sexta dimensión, fue un hombre de la sexta dimensión el que le reveló a Juan el apóstol toda la revelación del Apocalipsis, para dar a conocer todas las cosas que deben suceder pronto, conforme a Apocalipsis, capítulo 4, verso 1, Cristo dice:
“Sube acá (con esa Voz de Trompeta dice:)… Sube acá y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas.”
Y para cumplir esa promesa veremos en la Escritura cómo será el cumplimiento de esa promesa. Pero antes veamos lo que dice el Rvdo. William Branham en la página 48, párrafo 417, del “Libro de Citas,” que contiene un extracto de las “Siete Edades de la Iglesia.” Dice:
“La misma voz que llamó a Juan que subiera, la misma voz que dijo a Juan, ¡Sube acá!, es la misma voz que llamará a la Iglesia algún día. ¡Amén! Llama a la Iglesia también, la misma voz que llamó a Juan que subiera es la misma voz que llamó a Lázaro de la tumba. Esa misma voz del Arcángel. (¿Ven que es la Voz del Arcángel?). Cristo es la Voz del Arcángel, la Voz del Arcángel. ¿Ve? Esa voz de trompeta de Cristo llamó a Juan que subiera. La misma voz llamó a Lázaro en el sepulcro. El habló con fuerte voz… esa misma voz dijo a Juan, ¡Sube acá! ‘Yo te enseñaré unas cosas que han de suceder.’ Esa misma voz sonará cuando los muertos en Cristo resuciten, porque la trompeta, la trompeta… ¿Qué es una trompeta? La voz de Cristo: El mismo que dijo: ¡Sube acá!.”
Y la Voz de Cristo de edad en edad ha estado, ¿dónde? En Su Iglesia, en el mensajero de cada edad, y ha estado llamando y juntando a Sus escogidos de cada edad. “El que tiene oídos oiga lo que el espíritu dice a las iglesias.”
¿Y cómo le habló el Espíritu Santo a las Iglesias de edad en edad? Por medio del Mensajero de cada edad. Así es como se escucharía la Voz de Cristo en cada edad.
¿Y la Gran Voz de Trompeta cómo se escuchará en el Día Postrero? Por medio del Mensajero de la Edad de la Piedra Angular que es el Angel del Señor Jesucristo. Por eso en Apocalipsis 22, verso 6, dice… y aquí está la forma en que Cristo dará a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto, las cuales El prometió dar a conocer cuando dijo con esa Voz de Trompeta: “Sube acá y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas.” Las cosas que sucederán después de las siete edades de la Iglesia, Cristo las va a revelar a los que suban más arriba, los que suban a la Edad de la Piedra Angular, donde Cristo estará en Espíritu Santo manifestado en el Mensajero de la Edad de la Piedra Angular, y hablando por medio de él.
Apocalipsis 22, verso 6 en adelante, dice:
“Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto.
¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.”
¿Y quién da las palabras de la profecía de este libro? El Angel del Señor Jesucristo. Como en todos los tiempos hubo personas que pensaron que ellos tenían algo de parte de Dios sobre el pueblo, pero sin embargo quién tenía algo de parte de Dios para el pueblo era el mensajero de esa edad, y combatieron el mensajero de esa edad, y en la historia bíblica se encuentran como enemigos de Dios; porque trataron de quitarle la vista al pueblo del mensajero de esa edad para que el pueblo pusiese la vista en ellos; pero eso es rebelión contra Dios y Su Programa.
Y ahora, ¿quién tenía Palabra de Dios sobre el pueblo en cada edad? Pues el mensajero de cada edad en donde estaba el Espíritu Santo manifestado hablándole a Su pueblo. Por eso dice: “El que tenga oídos para oir, oiga lo que el espíritu dice a las iglesias.” Y el espíritu estaba, ¿dónde? En el mensajero hablando las cosas que quería dar a conocer.
Y para el Día Postrero el que tenga oídos para oir, oiga lo que el espíritu dice a la Iglesia del Señor Jesucristo y lo que dice para el mundo entero, y El estará diciendo las cosas que deben suceder, y estará dando a conocer las que ya han sucedido después de las siete edades y las que están en proceso para cumplirse.
Y ahora, ¿por medio de quién es que viene la revelación de las cosas que deben suceder pronto? Por medio de un Profeta que es el Angel del Señor Jesucristo. Cristo, el Angel del Pacto, el Espíritu Santo, que es nuestro Maestro, estará enseñándonos por medio de carne humana, por medio de Su Angel Mensajero, el Angel que le dio a Juan la revelación del Apocalipsis, que es enviado en el Día Postrero en carne humana en medio de la Iglesia de Jesucristo para ser el Instrumento de Cristo, del Espíritu Santo, para darnos a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto. Y ahí es donde estará el Arca del Pacto siendo traída al Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Cristo.
Y escuchando la Voz del Espíritu Santo, de Cristo, a través de Su Mensajero del Día Postrero en quien vendrá el Arca del Pacto, en el corazón de Su Mensajero para el Lugar Santísimo, siguiendo el Arca del Pacto que estará ahí en el corazón de ese Mensajero, siguiendo el Arca del Pacto en el Lugar Santísimo, llegaremos a la tierra prometida del nuevo cuerpo.
Por supuesto se levantarán muchas personas diciendo que tiene una revelación, o que Dios les ha dado alguna revelación. Pero conforme a la Escritura el único que tendrá la revelación Divina para el Día Postrero, para la Edad de la Piedra Angular, para dar a conocer las cosas que deben suceder pronto, es el que Jesucristo dice aquí, cualquier otro que diga que tiene algo tendría que ser el Angel del Señor Jesucristo, y solamente hay un ángel mensajero para cada edad, y así es para la Edad de la Piedra Angular.
Apocalipsis, capítulo 22, verso 16 al 17 dice:
“Yo Jesús he enviado mi ángel (o sea, que no son muchos mensajeros, sino Uno solo)…”
“Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.
Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.”
Para este tiempo final, como fue en cada edad que hubo solamente un mensajero, así es para la Edad de la Piedra Angular; pero Dios le dio a cada mensajero muchos maravillosos colaboradores que trabajaron brazo a brazo con él; pero la revelación no la tenían ellos, la tenía el ángel mensajero de cada edad; ellos estaban llamados a hacer que le llegara esa revelación divina para esa edad, porque Dios tiene para cada tiempo y cada edad una cosa, y otra cosa no podrá ocupar el lugar de eso que Dios tiene para ese tiempo; y Dios no confirmará ninguna otra cosa, sino lo que El tiene en Su Programa para ese tiempo. No puede ser de otra manera.
Si las personas tratan de colocar otra cosa, eso no hará la Obra divina correspondiente a ese tiempo, y la persona es entonces culpable de pervertir el Programa de Dios correspondiente a ese tiempo, porque le añadió o le quitó a la Palabra prometida para ese tiempo.
Dice el Rvdo. William Branham en el “Libro de Citas,” página 156, párrafo 1399:
“Para esa cierta edad Dios ha predestinado una cierta cosa para que acontezca y no hay otra cosa que puede tomar su lugar (no hay otra cosa). No me importa lo que es, cuántos logros hechos por el hombre, nada puede tomar su lugar. El predestinó a un hombre, tal vez un hombre ignorante; El le pudiera haber predestinado otro tipo de hombre. Cualquier cosa que sea, El le dará su clase, su don; le da su natura (o naturaleza), su estilo, y lo que sea… cómo él se expresa y cualquier cosa que él haga. El hace que el hombre de la hora tome la gente de la hora.”
Y conforme al libro del Apocalipsis el Hombre de la Hora para el Día Postrero es el Angel del Señor Jesucristo. ¿Y cuál es la gente de la Hora, de este tiempo en que vivimos? [la congregación dice: ¡Amén! – Editor] Pues nosotros latinoamericanos y caribeños sencillos, pero somos la gente de la Hora final, del tiempo final. La gente de la Hora del Hombre de la Hora presentes en este Día Postrero; como la gente de la hora de la primera edad estuvieron presentes con el hombre de la hora: San Pablo; y así la gente de la hora de cada edad estuvo presente al lado del Mensajero de su hora.
Ahora veamos algo más con relación a este misterio. Recuerden que fue un misterio en cada edad lo que Dios hizo en cada edad; después fue abierto ese misterio por Dios revelándoselo al Rvdo. William Branham y lo dio a conocer, y se vio cómo sucedió todo conforme a lo que estaba profetizado. Pero las cosas que estarían sucediendo después de las siete edades están profetizadas en la Escritura, y también el Rvdo. William Branham profetizó, pero no pudo abrir ese misterio de las cosas que estarían sucediendo en este tiempo final, en la Edad de la Piedra Angular; solamente él pudo profetizar, pero no pudo abrir ese misterio, porque ese misterio sería abierto a la gente de la Hora por el Hombre de la Hora; él podía abrir las cosas que correspondían a su hora para la gente de su hora.
Ahora, veamos algo más en la página 26… vamos a ver que nos dice aquí… Párrafo 218, dice:
“Y así que, nosotros…” Para que sepan de lo que estaremos hablando: de edad en edad se ha llevado a cabo un despertamiento espiritual, que es un avivamiento, cuando Dios ha enviado al hombre de la hora para captar, para recoger, los escogidos de su hora; y eso ha sido un avivamiento, Dios ha dado vida eterna allí en cada edad.
Y ahora, así ha sido de edad en edad, y ahora nos toca la Edad de la Piedra Angular. Vamos a ver, dice:
“Y así que, nosotros esta noche, queremos pensar en eso, y recordar que en medio de todo este clamor, Dios no puede enviar un avivamiento (Dios no puede enviar un avivamiento, ¿hasta cuándo? Vamos ver:), HASTA QUE TENGA AL HOMBRE EN FORMA PARA RECIBIRLO (o sea, al mensajero)… y antes que nosotros podamos tener un avivamiento, DIOS TIENE QUE LLAMAR AFUERA Y ENTRENAR AL HOMBRE. (DIOS ENTRENA AL HOMBRE) PARA LLEVAR SU MENSAJE.”
¿Ve? Así hizo con cada mensajero de cada edad, para tener en cada edad el avivamiento de cada edad.
¿Y luego del avivamiento que hemos visto en cada edad, habrá otro avivamiento? Esa misma pregunta se la hizo el Rvdo. William Branham. Pero allá, vean ustedes, él dijo: “No se puede tener un avivamiento, ¿sin qué? Sin que Dios tenga al hombre entrenado para ese avivamiento, o sea, el mensajero. El lo entrena, le da su estilo, le da su forma de hablar, le da todo lo que Dios ha predestinado para él, y le da sobre todo Su Espíritu y Su Palabra, Su Mensaje; porque otro Mensaje no va a llevar a cabo la Obra, sino el Mensaje que le toca a esa edad; se lo da al Mensajero de esa edad, ese Mensajero lo predica, y surge el avivamiento de esa edad.
En la página 157, dice, en el párrafo 1407:
“Estoy solamente edificando. La hora está cerca a la mano cuando Uds. van a ver pasar algo, cuando algo va a tener lugar y todo este fundamento, aquí sólo ha sido colocando una base para un corto mensaje rápido que sacudirá toda la nación.”
Y ahora, en la página 166, párrafo 1485, dice… del “Libro de Citas,” este es un extracto contenido del Mensaje: “El único lugar provisto de Dios para adorar,” predicado en el 1965. Dice:
“Ahora, yo estaba poniéndome bastante viejo y pensé, ‘¿Habrá otro avivamiento, veré otro tiempo?’ Y tan solo recuerden (ahora, ¿después de la séptima edad de la Iglesia habrá otro avivamiento, habrá otro tiempo, o sea, otra etapa del Programa Divino, otra edad?)… Y tan solo recuerden, del Oeste vendrá un Jinete en un Caballo Blanco. Cabalgaremos esta senda otra vez. Eso es correcto. Tan pronto como estemos listos. Ven Uds. es una promesa.”
Así que la promesa es que habrá otro avivamiento, y por consiguiente tiene que ser para otra edad: la Edad de la Piedra Angular; y por consiguiente Dios tiene que tener el hombre preparado, adiestrarlo y darle Su Palabra, colocar Su Palabra revelada en su corazón, colocar el Arca del Pacto en su corazón, para que ese hombre predique ese Mensaje para una Nueva Edad: la Edad de la Piedra Angular, y se forme así una Nueva Edad; donde no había nada sea formada una Nueva Edad, y surja un avivamiento: el avivamiento del Día Postrero.
Y ahora podemos ver dónde el avivamiento del Día Postrero tiene que estar siendo llevado a cabo. En ninguna de las siete edades, ni en el cuello tampoco, sino en la Edad de la Piedra Angular.
Esta etapa aquí entre la séptima edad y la Edad de la Piedra Angular, donde el Rvdo. William Branham tiene escrito aquí: “Espíritu Santo.” [El Hno. William enseña el diagrama ‘La estatura de un hombre perfecto’ – Editor]. Luego que el Espíritu Santo salió de las siete edades, luego que el Espíritu Santo salió de la séptima edad, estaba a la parte afuera, tocando la puerta y no le abrió la puerta, quedó ahí en medio de la séptima edad y de la Edad de la Piedra Angular.
Y ahora, vamos a ver lo que dice el Rvdo. William Branham en la página 134, párrafo 1197:
“El prueba todas Sus Palabras -todas Sus palabras. Piensen en ello. ¡todas Sus Palabras! Y Uds. eran Su Palabra. El era la Palabra, y Uds. eran parte de Su Palabra, y esa es la razón que Uds. fueron mandados acá para confirmar su lugar en la vida.”
Y nuestro lugar en la vida es confirmado cuando en la Edad que nos toca vivir escuchamos la Voz de Cristo, somos colocados en el Cuerpo Místico de Cristo, donde la Vida de Cristo está manifestada. En el Cuerpo Místico de Cristo es que nuestro lugar es confirmado y somos ahí confirmados como miembros de la Familia de Dios, miembros del Templo Espiritual de Cristo.
Así que hemos sido enviados a este planeta Tierra para confirmar nuestro lugar en la vida eterna, en el Cuerpo Místico de Cristo, ahí es donde están los que reciben vida eterna; los que han recibido vida eterna están en el Cuerpo Místico de Jesucristo.
“No…” Dice:
“Esa es la razón porqué Uds. fueron mandados acá para confirmar su lugar en la vida. No creo que Uds. captarán eso. El es la Palabra. ¿Ahora lo captan? El estaba en los pies en Lutero, en los muslos en Wesley, en los hombros en Pentecostés. ¿Ven lo que quiero decir? El es la cabeza. Uds. tienen una parte que se junta, esta hora que estamos viviendo ahora. No la parte de los pies, no la parte del muslo, no la parte del hombro, sino la parte del cuello.”
Esa es la parte aquí entre la séptima edad y la Edad de la Piedra Angular, El coloca esta parte aquí como los hombros, esta de arriba como la cabeza y esta parte aquí como el cuello [El Hno. William enseña el diagrama ‘La estatura de un hombre perfecto’ – Editor]. Y así fue con los discípulos de Juan el Bautista, el cual fue el mensajero de la séptima edad de la Iglesia hebrea, pero cuando lo rechazaron quedó en la edad o etapa del cuello; esa etapa, que ni es la séptima edad ni es la edad de la cabeza; pero son preparados para que suban a la Edad de la cabeza: la Edad de la Piedra Angular.
Y él prepara el pueblo para un Mensajero que viene después de él, para una nueva Edad: la Edad de la Piedra Angular, con un Mensaje para todo el pueblo.
Hemos visto que la promesa es que habrá un avivamiento. Y ahora, ¿dónde? En la Edad de la Cabeza: la Edad de la Piedra Angular.
Y así como cada avivamiento que hubo en cada edad, hubo un territorio donde se cumplió ese avivamiento. Asia Menor, la primera edad, estuvo el avivamiento en la primera edad y su mensajero fue San Pablo; luego Francia en la segunda edad y su mensajero fue Ireneo; luego en Francia y en Hungría y su mensajero fue Martín en la tercera edad; luego para la cuarta edad su mensajero fue Colombo y el territorio fue Irlanda y Escocia; luego para la quinta edad el territorio fue Alemania y su mensajero fue Lutero; luego para la sexta edad el territorio fue Inglaterra y su mensajero fue Wesley; luego para la séptima edad el mensajero fue el Rvdo. William Branham y el territorio Norteamérica.
Siempre se enciende el avivamiento en un territorio y de ahí se extiende a otras naciones. Y luego de esos siete grandes avivamientos espirituales en el Cuerpo Místico de Cristo para llamar y juntar a los escogidos de Dios en cada edad, luego viene el avivamiento de la Edad de la Piedra Angular y el territorio, ¿el territorio es cuál? Pues la América Latina y el Caribe.
Hubo diferentes idiomas en los diferentes avivamientos, porque el idioma era el idioma que hablaba el mensajero, a través de ese idioma el Espíritu Santo le habló a Su Pueblo y llamó y juntó a Sus ovejas, a Sus escogidos de edad en edad. El dijo: “Mis ovejas oyen mi voz y me siguen.” ¿Y cómo las llamaría, cómo escucharían Su Voz? Por medio del Mensajero de cada tiempo.
¿Y cómo escucharán la Voz de Cristo en este tiempo final en la Edad de la Piedra Angular? Por medio del Mensajero del Día Postrero, de la Edad de la Piedra Angular predicando el Mensaje del Evangelio en el Día Postrero. Y esa será la Gran Voz de Trompeta o Trompeta Final.
El Rvdo. William Branham hablándonos de esa Trompeta final o Gran Voz de Trompeta nos dice en la página 130 del “Libro de Citas,” verso 1164, que contiene un extracto del Mensaje: “Cisternas rotas,” página 33, dice:
“Recuerden que los que están vivos y queden no impedirán a los que están durmiendo, porque la Trompeta de Dios, esa última Trompeta (la sexta acaba de tocar), y esa última Trompeta como el último Sello, será la Venida del Señor; tocará y los muertos en Cristo se levantarán primero.”
La Gran Voz de Trompeta o Trompeta final sonando, ¿qué es lo que estará revelando, qué es lo que estará sonando, proclamando? El misterio del Séptimo Sello para la Iglesia del Señor, y misterio de la Séptima Trompeta para el pueblo hebreo.
El Rvdo. William Branham aquí en la página 128 párrafo 1143, dice:
“Debajo de la Séptima Trompeta es para Israel lo mismo que el Séptimo Sello fue para la Iglesia.”
Y la Séptima Trompeta y el Séptimo Sello, ¿es qué? La Venida del Señor, la Segunda Venida de Cristo. Y ese misterio siendo revelado a la Iglesia de Jesucristo es la Séptima Trompeta o la Trompeta Final o Gran Voz de Trompeta sonando para la Iglesia de Jesucristo y después para el pueblo hebreo.
En la página 129, verso 1150, dice:
“Ahora, tan pronto como esta Iglesia, el misterio del Séptimo Sello es conocido, y los judíos son llamados por el misterio de la Séptima Trompeta que son dos profetas Elías y Moisés.”
¿Esto es así por qué? Porque el Hijo del Hombre viene con Sus ángeles, y la Venida del Hijo del Hombre con Sus ángeles es la Venida de Cristo con Moisés y Elías, como El lo mostró en El monte de la transfiguración, cuando mostró allí la Venida del Reino de Dios.
En la página 47, verso 402, dice:
“Y nosotros que vivimos y hayamos quedado hasta la Venida del Señor, no evitaremos o impediremos a los que duermen (no evitaremos o impediremos a los que duermen). Esos preciosos que sellaron su testimonio con su sangre. ‘No impediremos (o estorbaremos) a los que duermen, porque sonará la Trompeta.’ Algo acontecerá, ese algo Evangélico sonará, el anuncio de Su Venida. ‘Y los muertos en Cristo resucitarán primero. Y nosotros los que vivimos y permanezcamos seremos transformados.’ Parados allí, y sentir un cambio; el pelo canoso se irá, las arrugas cesarán, cambiados en un momento, en un abrir de ojos. Y encontraremos a nuestros seres amados primero.”
Para ser transformados los escogidos del Día Postrero, ¿qué estarán escuchando? La Gran Voz de Trompeta o Trompeta final que es la revelación del Séptimo Sello para la Iglesia y Séptima Trompeta para el pueblo hebreo, es la revelación del Séptimo Sello, la revelación de la Segunda Venida de Cristo. Por eso el Rvdo. William Branham dijo que los Truenos revelarían el misterio que nos daría la fe para el Rapto. Página 128 —aquí la tengo—, dice:
“Ahora, los Siete Truenos de Apocalipsis permitirán que El muestre a la Novia, cómo prepararse, para obtener la gran fe de traslación.”
Y en la página 212, dice:
“La Novia no ha tenido un avivamiento, todavía no ha habido allí ningún avivamiento, ninguna manifestación de Dios para sacudir a la Novia. Estamos esperando eso. Se necesitarán esos Siete Truenos misteriosos para despertarla. El los mandará. Lo ha prometido.”
¿Qué es lo que le da el avivamiento del Día Postrero a la Iglesia Novia del Señor Jesucristo? Los Siete Truenos de Apocalipsis, capítulo 10, verso 1 al 11.
¿Y que revelan los Siete Truenos? Revelan el misterio del Séptimo Sello, el misterio de la Segunda Venida de Cristo, misterio que en tiempos y edades pasadas y dispensaciones pasadas nadie supo nada, pero que conforme a la promesa divina será revelado a la Iglesia de Jesucristo en este tiempo final.
Dice el Rvdo. William Branham hablándonos de los Siete Truenos, que los Siete Truenos revelarán el misterio del Séptimo Sello. Página 474 y 475, dice [“Libro de los sellos.” – Editor]; 475, dice:
“El misterio de ese Sello no fue revelado, porque fueron Siete Truenos que tronaron, y allí está perfectamente, porque ninguno sabe nada al respecto, no estaba escrito. Entonces estamos en el fin.”
O sea, que el misterio del Séptimo Sello lo tienen los Siete Truenos, y los que escuchen los siete Truenos obtendrán el conocimiento del Séptimo Sello, porque los Siete Truenos es la Voz de Cristo como el León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores, hablándole a Su Iglesia en el Día Postrero en la Edad de la Piedra Angular y revelándonos el misterio correspondiente a nuestro tiempo; así como hablándole el Espíritu Santo por medio de cada ángel mensajero el misterio correspondiente a cada tiempo, y cumpliendo el misterio correspondiente a cada edad, fueron llamados y juntados los escogidos de cada tiempo.
Y así cumpliendo el misterio de la Edad de la Piedra Angular y revelándoselo a Sus escogidos, somos preparados para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero. ¿La fe del Rapto la dan qué? Los Truenos. ¿Y los Truenos revelan qué? El misterio del Séptimo Sello. Dice en la página 474 [“libro de los sellos.” – Editor]. Dice:
“Ahora, el gran secreto bajo este Sello (Séptimo Sello) yo no lo conozco. ¡No lo conozco! No lo pude descifrar; no pude captar lo que decía. Pero yo sé que eran los Siete Truenos tronando rápidamente uno tras otro, haciendo siete estruendos, y eso se abrió hacia algo más que vi. Cuando vi eso, busqué la interpretación y me pasó tan rápidamente que no lo pude descifrar.”
Y más abajo ahí, dice:
“Estén preparados, porque no saben en qué hora algo puede suceder.”
Y cuando algo ha sucedido en esta Tierra conforme al Programa de Dios, ¿pues ha sido qué? El Programa de Dios correspondiente a cada edad donde Dios ha enviado el Mensajero de cada edad. Más abajo dice… en esa página 474, y luego 475, dice:
“Yo no sé quién será (o sea, que está hablando de una persona) ni qué va a suceder. ¡No sé! Solamente sé que esos Siete Truenos contienen el misterio por cuya razón hubo silencio en el Cielo. ¿Todos entienden?
Quizás sea ahora el tiempo y la hora cuando aparezca esta gran persona que hemos estado esperando. Quizás este ministerio, por el cual he tratado de convertir a la gente a la Palabra, ha servido de fundamento. Si así es, entonces les estaré dejando para siempre. No habrá dos aquí al mismo tiempo. Y aun si así fuera, él crecerá y yo menguaré.”
“No habrá dos aquí al mismo tiempo…” O sea, no estará el precursor y el precursado aquí al mismo tiempo. Pero si llega a estar aquí al mismo tiempo él crecerá y el precursor menguará; lo mismo que sucedió entre Juan el Bautista y Jesús. Jesús y Juan el Bautista tuvieron un tiempo en el cual Sus Ministerios se entrelazaron, pero Juan dijo: “A él le conviene crecer, y a mí menguar.”
“¡Yo no sé! Pero Dios me ha dado el privilegio de mirar y ver lo que es; lo vi abrirse hasta donde lo vi.”
Y en la página 482, dice:
“Está hablando de Israel en su propia patria. Pero, ¿notaron que El no habla nada de la revelación de este Séptimo Sello; y también acá en Apocalipsis en la apertura de los Sellos, también lo omitió? Vemos pues que es un misterio por completo, la hora todavía no ha llegado para que se diera a conocer este misterio. Hemos llegado hasta aquí, y lo demás nos será dado allí en el tiempo cuando aparezca Jesús nuevamente sobre la Tierra para llevar a Su Novia.”
Y en la página 469, dice:
“¿Y notaron que dije que uno de esos Angeles era muy raro? Me pareció muy distinto a los demás. Estaban en una constelación con tres a cada lado y uno arriba; y el que estaba a mi lado, contando desde la izquierda hacia la derecha, ese sería el séptimo ángel. El era más brillante y significaba más para mí que los demás. Les dije que tenía el pecho así robusto y estaba volando hacia el Oriente. Les dije también que: ‘Me levantó, me alzó.’ ¿Se acuerdan?.
Ahora, ¡aquí está! Era el que tenía el Séptimo Sello, lo cual he mantenido como una pregunta en mi mente toda mi vida.”
Para el cumplimiento del Séptimo Sello, el Angel que tiene el Séptimo Sello, tiene que tener una manifestación aquí en la Tierra. Allí en esta nube encontramos los siete ángeles mensajeros de las siete edades y otro Angel que es diferente a los demás; cuando tornamos la foto de los ángeles hacia la derecha, encontraremos que forman el Rostro del Señor, y aquí tenemos la barba formada por los ángeles [El Hno. William muestra la fotografía de la nube – Editor], y tenemos el Cabello Blanco formado por el Angel que era diferente a los demás.
¿Y quién dijo que eso es así? Lo dijo el que estuvo allí presente. Y nos dijo en la página 23 del Mensaje: “Tratando de hacer servicio a Dios fuera de Su voluntad.” Dice:
“Yo pensé: “Quizás esa Voz quiere decir que lo voltee hacia la derecha (estaba mirando la foto y la Voz le decía que lo… ‘Voltealo derecho,’ o sea, quiere decir: ‘voltealo a la derecha.’ Y entonces lo volteó a la derecha y cuando lo vio, vio que formaba el Rostro del Señor).” Y cuando lo hice, Uds. ven lo que es: la Cabeza de Cristo (o sea, el rostro de Cristo) de Hottman (o sea, como la pintura que hizo Hottman el pintor), a la edad de 33 años. Aquí, miren aquí, vean Su barba negra, Su rostro, Sus ojos, Su nariz y el resto. Vea la parte en Su pelo (o sea, en su cabello) aquí ascendiendo. Y El está cubierto con esa peluca del Angel blanco para mostrar que el Mensaje de El siendo Dios es la verdad. El es el Juez Supremo del universo, Juez Supremo del Cielo y la Tierra. El es Dios, y ninguna otra cosa sino Dios. El es Dios expresado en forma humana llamado el Hijo de Dios, siendo el Hijo la máscara (o sea, el velo).”
Y ahora, hemos visto el Cabello Blanco del Señor formado por el Angel que era diferente a los demás, por el Angel que tiene el Séptimo Sello.
Y ahora, podemos ver que el misterio de ese Angel que era diferente a los demás, siendo el misterio del Séptimo Sello es el misterio que sería revelado a la Iglesia del Señor Jesucristo bajo la Gran Voz de Trompeta o Trompeta final, revelando el misterio del Séptimo Sello, el misterio de Cristo viniendo a Su Iglesia en el Día Postrero en y a la Edad de la Piedra Angular.
Y así escuchando Su Voz, Su Gran Voz de Trompeta, recibimos el avivamiento del Día Postrero, el avivamiento del Día Postrero se recibe por medio de la revelación que nos habla Cristo con esa Voz como de Siete Truenos tronando y revelándonos el misterio de Su Venida; eso es lo que nos da el avivamiento del Día Postrero de la Edad de la Piedra Angular, y es lo que nos da la fe para ser transformados y raptados en este tiempo final.
Hemos visto lo que estará creyendo la Iglesia de Jesucristo para ser transformada y raptada en este tiempo final. Y así estará la Iglesia de Jesucristo en este tiempo final siguiendo el Arca del Pacto, a Cristo el Angel del Pacto, el Angel que era diferente a los demás; Cristo, el Angel del Pacto, en la Edad de la Piedra Angular viniendo a Su Iglesia, al Lugar Santísimo de Su Iglesia, viniendo contenido en el corazón de un Profeta que es el Mensajero del Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo.
Así es como entra Cristo, el Verbo, la Palabra, al Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual; y así es como es colocada el Arca del Pacto en el Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo nuestro Salvador. Y nosotros seguimos a Cristo, el Arca del Pacto, en el Lugar Santísimo, en La Edad de la Piedra Angular; y así somos identificados como el pueblo que sigue el Arca del Pacto en este Día Postrero, cuando ya las siete edades han terminado; lo de cada una de esas edades pasadas fueron los que siguieron el Arca del Pacto en la edad que les tocó vivir, y nosotros somos los que seguimos el Arca del Pacto en la Edad de la Piedra Angular, en la Edad del Lugar Santísimo del Templo Espiritual de Jesucristo.
Para nuestra transformación no habrá otra cosa, ni otro Mensaje, que nos dé la fe para ser transformados y raptados, sino el Mensaje de la Gran Voz de Trompeta del Evangelio del Reino revelándonos el misterio de Su Venida, el misterio del Séptimo Sello; y estar escuchando esa Gran Voz de Trompeta es estar escuchando la Voz de Cristo, como el León de la tribu de Judá clamando como cuando ruge un león y Siete Truenos emitiendo Su Voces y revelándonos el misterio del Séptimo Sello.
¿Vieron lo sencillo que es todo? Y estar escuchando Su Voz es estar escuchando los Siete Truenos retumbando en esa manifestación de Cristo clamando como cuando ruge un león, y estar escuchando Su Voz y creyendo todo lo que El en este tiempo final nos estaría hablando, es estar escuchando la Voz del Espíritu Santo en este tiempo final. Y el que tiene oídos para oir, oiga lo que el Espíritu Santo dice a Su Iglesia en este tiempo final.
Y por cuanto nunca hemos caminado por este camino en edades pasadas, nos corresponde seguir el Arca del Pacto, y así ser identificados como el pueblo que sigue el Arca del Pacto.
Hay muchas religiones en este planeta Tierra y hay muchas sectas religiosas en todas las religiones, y hay muchas voces. Pero los escogidos de Dios del Día Postrero siguen el Arca del Pacto; y por consiguiente la Voz de Cristo, del Espíritu Santo hablándonos y dándonos a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto en este tiempo final.
La Voz de Cristo, del Espíritu Santo, en el Día Postrero es la Voz del Angel del Pacto, Cristo, a través del Mensajero del Día Postrero, y a nosotros como Cuerpo Místico de Cristo y como miembros del Cuerpo Místico, no nos interesa escuchar voces de este mundo, sino la Voz de Cristo para nuestra Edad y nuestra Dispensación, para así seguir el Arca del Pacto en la Edad de la Piedra Angular, sin desechar lo que Dios habló por medio de los siete mensajeros de las siete edades; aunque ese fue el Mensaje de Dios para esas edades, pero ellos hablaron de lo que Dios haría en nuestro tiempo, San Pablo y los otros mensajeros y el Rvdo. William Branham; y damos a conocer lo que ellos hablaron de lo que Dios haría en este tiempo final, en el avivamiento del Día Postrero para la Iglesia del Señor Jesucristo, para que así Su pueblo, Su Iglesia, siguiera el Arca del Pacto, Cristo, la Palabra, cumpliendo Sus promesas correspondientes a este tiempo final, para eso es que Cristo se manifiesta en este tiempo, como lo hizo en tiempos pasados, para cumplir Sus promesas correspondientes a cada tiempo.
Hemos llegado al tiempo más grande y glorioso de todos los tiempos, para el pueblo que sigue el Arca del Pacto tener el avivamiento del Día Postrero, y tener el gozo y el regocijo del Día Postrero y ser preparados para ser transformados.
Es la Gran Voz de Trompeta, la Voz de Cristo, el Angel del Pacto, la Voz del Espíritu Santo, los Siete Truenos de Apocalipsis, lo que nos da la fe para ser transformados y raptados; y por esa causa para este tiempo Dios ha permitido que tengamos cámaras de videos, grabadoras e imprentas para que todo quede grabado, y también quede impreso todo lo que el Espíritu de Dios, el Espíritu Santo, Cristo, nos esté hablando en este tiempo final, y pase, tal y como fue dicho pase al pueblo que sigue el Arca del Pacto, para así ser preparados para ser transformados en este tiempo final.
Por eso para el pueblo que sigue el Arca del Pacto Dios tiene Su Palabra prometida para este tiempo final siendo cumplida y revelada a los escogidos de Dios de este tiempo final; sin esa revelación ninguna persona puede ser transformada y raptada; y toda revelación tiene que venir, ¿cómo? Por el Orden Divino. No puede aparecer una persona por un lado y otra por otro diciendo: “Dios me reveló tal cosa.” Y otro: “No, aquí Dios me reveló……………….
[CORTE EN EL VIDEO ORIGINAL – EDITOR].
….. y dándole a conocer al pueblo de Dios. “Porque no hará nada el Señor Jehová sin que antes revele Sus secretos a Sus siervos Sus Profetas.” Por lo tanto nadie tiene nada para el pueblo, sino Cristo, el Angel del Pacto, el Espíritu Santo, y lo que El tiene para revelar, o para decirle a Su Iglesia, lo estaría diciendo, revelando, por medio de Su Angel Mensajero, del Profeta de la Dispensación del Reino y de la Edad de la Piedra Angular. No hay otra forma, Dios no cambia Su Programa que El tiene para este tiempo.
Por eso es que para este tiempo Dios está llamando y juntando a Sus escogidos en la cúspide del Monte de Sion, la Edad de la Piedra Angular, para la Adopción de todos los hijos e hijas de Dios, porque ése es el pueblo que sigue el Arca del Pacto.
Y ahora la Iglesia de Jesucristo pasando por sus diferentes etapas ha estado de etapa en etapa del este hacia el oeste, y ahora se encuentra en la etapa del oeste, en la América Latina y el Caribe, y por eso somos nosotros bienaventurados, porque la mejor parte del Templo Espiritual de Cristo nos ha tocado a nosotros, y la revelación del Séptimo Sello dada por Cristo, clamando como cuando ruge un león y Siete Truenos emitiendo Sus Voces, nos ha tocado a nosotros en este tiempo final.
Por eso cuando el Rvdo. William Branham escuchó la Tercera Etapa, dijo que era en un idioma desconocido, desconocido para él, él escuchó pero no puedo entender. Cada edad ustedes pueden ver, que ha tenido un idioma, el idioma que habla el Mensajero.
Así que en este tiempo, así como sonó una Trompeta en cada edad en el idioma del Mensajero, para el Día Postrero la Gran Voz de Trompeta suena y nos revela los misterios correspondientes a este tiempo final, el misterio del Séptimo Sello, y así nos abre el misterio más grande de los cielos y de la Tierra que estaba oculto en la Mente de Dios. Y así el pueblo que escucha la Voz de Cristo, el Angel del Pacto, el Espíritu Santo, es el pueblo que sigue el Arca del Pacto; así como fue identificado el pueblo de cada edad que siguió el Arca del Pacto en su edad, y luego cuando el Rvdo. William Branham habló de lo que se cumplió en las edades pasadas y dio a conocer la historia, fue mostrado cuál fue el pueblo que siguió el Arca del Pacto en cada edad, escuchando así la Voz del Espíritu Santo.
Y ahora es identificado el pueblo que sigue el Arca del Pacto y escucha la Voz del Espíritu Santo en este Día Postrero.
¿Y dónde está ese pueblo? [La congregación dice ¡Amén! – Editor] Aquí estamos en este Día Postrero escuchando la Voz del Espíritu Santo, dándonos a conocer el misterio del Séptimo Sello y todas las cosas que giran alrededor del Séptimo Sello.
Hemos visto cuál es EL PUEBLO QUE SIGUE EL ARCA DEL PACTO.
Ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes en esta noche, dándoles a conocer cuál es el pueblo que sigue el Arca del Pacto, y cómo sigue el Arca del Pacto, y dónde está el Arca del Pacto en este tiempo final. Por lo tanto, si no aparece el arca del pacto que construyó Moisés, que estuvo en el tabernáculo que construyó Moisés y el templo que construyó Salomón, no hay problema. El Arca del Pacto está en la Iglesia de Jesucristo en el Lugar Santísimo de Su Templo Espiritual, en la Edad de la Piedra Angular, Cristo, la Palabra prometida para nuestro tiempo, El es el Arca del Pacto, Cristo.
Que las bendiciones de Jesucristo, el Angel del Pacto, el Arca del Pacto, sean sobre todos ustedes y sobre mí también, y pronto todos seamos transformados, los muertos en Cristo resucitados y todos llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo. En el Nombre Eterno del Señor Jesucristo. Amén y amén.
Muchas gracias por vuestra amable atención y será hasta mañana Dios mediante; en la mañana con los ministros y luego el domingo en la actividad del domingo, en el velódromo donde estuvimos en la actividad de la otra ocasión en que estuve con ustedes.
Oren mucho por estas actividades: la de mañana y la del domingo también, para que Dios siga derramando ese despertamiento espiritual, ese avivamiento espiritual, en el alma de las personas que escuchan la Voz de Cristo. Y trabajemos en Su Obra todos los días de nuestra vida.
Bueno, dejo con nosotros nuevamente al Rvdo. Miguel Bermúdez Marín para continuar y finalizar nuestra parte en esta ocasión.
Que Dios les bendiga y pasen todos muy buenas noches.
“EL PUEBLO QUE SIGUE AL ARCA.”