Muy buenas tardes, ministros compañeros en el Cuerpo Místico de Cristo, y también damas reunidas en esta ocasión, y jóvenes también, los cuales veo, jovencitas y jovencitos reunidos también en esta ocasión, y también veo niños. Así que, Dios les bendiga grandemente; es una bendición y privilegio grande estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente a este tiempo final. Para lo cual leemos en Primera de Pedro, capítulo 2, versos 4 en adelante (4 al 10), dice:
“Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa,
vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
Por lo cual también contiene la Escritura:
He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa;
Y el que creyere en él, no será avergonzado.
Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen,
La piedra que los edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ángulo;
y:
Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados.
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.”
Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla.
“LA PIEDRA DEL ÁNGULO ESCOGIDA Y PRECIOSA.”
A través de la Escritura, encontramos esa Piedra escogida, preciosa, por ejemplo en el Salmo 118, verso 22, dice:
“La piedra que desecharon los edificadores
Ha venido a ser cabeza del ángulo.”
También en Isaías, capítulo 28, verso 16, dice:
“…por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.”
Y ahora, encontramos que así como Dios tipifica seres humanos en árboles, también los tipifica en piedras; por eso es que Juan dice, Juan el Bautista cuando estaba predicando y bautizando, dice: “Dios puede levantar, aun de estas piedras hijos a Abraham,” pues no es piedras literales para levantar hijos, sino personas que estaban creyendo en el mensaje de Juan el Bautista, se estaban arrepintiendo y estaban siendo bautizados por Juan el Bautista, “y de esas personas Dios (dice Juan el Bautista) puede levantar hijos a Abraham,” que serían los que luego recibirían a Cristo y seguirían a Cristo; y en el tiempo en que Dios derramaría de Su Espíritu, recibirían el Espíritu de Dios y nacerían en el Reino de Dios como hijos e hijas de Dios.
Esas son Piedras, pero no piedras de las que están en el campo, sino Piedras vivas, seres humanos representados en piedras como: “LA PIEDRA DEL ÁNGULO ESCOGIDA Y PRECIOSA” Es Jesucristo nuestro Salvador, Él es la Piedra de la cual hemos sido cortados nosotros, somos parte de Él; por lo tanto, somos descendientes de Dios por medio de Cristo, Él es la Piedra de fundamento, Él es la Piedra del Ángulo sobre la cual está fundada la Iglesia del Señor Jesucristo.
Y ahora, con esas Piedras vivas que son los creyentes en Cristo, dice San Pedro que Dios está construyendo un Templo, dice: “Y vosotros también como piedras vivas…” Es que todo lo que es Cristo, lo son los creyentes en Él. Él es la luz del mundo, dice Cristo: “Yo soy la luz del mundo, el que me sigue no andará en tinieblas; mas tendrá la luz de la Vida.” O sea, tendrá el Espíritu Santo. Y hablando de Sus discípulos, de los creyentes en Él, dice: “Vosotros sois la luz del mundo.” Una ciudad asentada sobre un monte alto no se puede esconder.
Y ahora, encontramos que todo lo que es Cristo, lo son también los creyentes en Él. Él es el Hijo de Dios, los creyentes en Él son los hijos e hijas de Dios descendientes de Dios por medio de Cristo; Él es el heredero de toda la Creación, y los creyentes en Cristo son herederos y coherederos con Cristo de toda la Creación; Cristo es el Rey de reyes y Señor de señores, y los creyentes en Cristo son Reyes también; Él es el Sumo Sacerdote del Templo celestial según el Orden de Melquisedec, y los creyentes en Él son Sacerdotes de Dios de ese orden celestial, no del orden levítico, no como descendientes de Aarón, sino como descendientes de Cristo por medio del Espíritu Santo.
Y ahora, también Cristo es el Juez que juzgará a los vivos y a los muertos; y San Pablo dice: “¿No sabéis vosotros que los santos juzgarán al mundo y aún a los ángeles?” Es que la Corte, el Poder Judicial, celestial, de ese Poder Judicial celestial, y a ese Poder Judicial celestial pertenece Cristo; Él es el Juez de los vivos y de los muertos colocado por Dios, y todos lo creyentes en Él que forman Su Iglesia son Jueces también. “¿No sabéis que los santos juzgarán al mundo y aún a los ángeles?” Es que pertenecen al Poder Judicial del Reino celestial de Dios; son los creyentes en Cristo los que han recibido la bendición del Reino del cual Cristo dice allá en Jerusalén, en el tiempo de Su entrada triunfal, dice: “El Reino de Dios será quitado de vosotros y dado a gente que produzca los frutos de Él.”
Y ahora, esa bendición pasa a la Iglesia del Señor Jesucristo, y es la Iglesia la que ha estado produciendo el fruto, produciendo hijos e hijas de Dios por medio de la unión de Cristo con Su Iglesia de edad en edad. De edad en edad nace una nueva generación de hijos e hijas de Dios en el Cuerpo Místico de Cristo; estuvo entre los gentiles señalando las generaciones de Cristo entre los gentiles, la primera edad con San Pablo, esa generación produjo muchos hijos e hijas de Dios, Cristo se reprodujo en muchos hijos e hijas de Dios en ese tiempo de la primera edad en Asia Menor; y por eso llevan el Nombre no solamente de Cristo, sino también del mensajero.
Es como en la familia, llevan el nombre del padre pero también tienen el nombre del abuelo, traen el nombre, ¿por qué? Porque ese apellido viene pasando por la familia. Y siempre, cada edad con su mensajero es la rama de cada edad, la generación de cada edad, en donde Cristo se reproduce en hijos e hijas de Dios.
Es importante saber… ya en la noche, en la tarde… en la noche estaremos viendo el tema que tiene que ver con la posición de la Iglesia. “LA IGLESIA RECONOCIENDO SU POSICIÓN.” En cada edad, tiene que reconocer la posición que le corresponde en el Cuerpo Místico de Cristo, o sea, en la generación que le toca vivir, el mensajero que Dios le envía, y la etapa o edad correspondiente.
Encontramos, que a través de la historia de la Iglesia le han llamado del nombre del mensajero en algunas edades y en algunos tiempos a los creyentes. Por ejemplo: le llamaron luteranos a los del tiempo de Lutero; le llamaron wesleyanos a los del tiempo de Wesley, y así por el estilo, por el nombre del mensajero con el cual nace una rama, una generación de Cristo en la Iglesia del Señor Jesucristo. Es una Familia descendiente de Dios por medio de Cristo, por eso es llamada la Casa de Dios, el Templo espiritual de Dios para morada de Dios en Espíritu en ese Templo espiritual, Su Iglesia, y en cada creyente en Cristo como individuos que también es un templo humano, un templo espiritual; como Cristo cuando dice frente al templo: “Destruyan este templo, y en tres días Yo lo levantaré,” y muchos pensaban que hablaba del templo literal que estaba allí frente, pero Él hablaba de Su cuerpo, porque un cuerpo es un templo humano, y en Jesucristo, Su cuerpo físico como templo humano, moraba Dios en toda Su plenitud; por eso Él hablaba de Su cuerpo como Templo ahí en San Juan, capítulo 2, versos 17 al 23.
Y ahora, nos dice San Pablo: “¿No saben ustedes que ustedes son templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?”
Y ahora, esa es la Casa de Dios, la Familia de Dios, las Piedras vivas que forman la Iglesia del Señor Jesucristo. Él está construyendo ese Templo espiritual, esa Familia donde la presencia de Dios ha estado, está y estará eternamente. Su Iglesia como Templo espiritual, encontramos que de Adán hasta Jesús corresponde al Atrio; por eso cuando Cristo murió era el tiempo o etapa del Atrio, porque el Sacrificio se efectuaba en el Atrio.
Luego, encontramos que de Cristo y los apóstoles, o de los apóstoles en adelante se entra al Lugar Santo del Templo espiritual de Cristo, se construye el Lugar Santo con Piedras vivas, y luego… hasta el séptimo mensajero.
Y luego, después del séptimo mensajero viene la Edad de la Piedra Angular, la Edad de la Adopción, la Edad correspondiente al Lugar Santísimo que con Piedras vivas, seres humanos creyentes en Cristo se construye. San Pablo decía: “Yo como perito arquitecto puse el fundamento.” Ahora vean cómo es construido: cada mensajero se encarga del trabajo correspondiente a su etapa, a su edad, y tiene que ver como sobreedifica, no puede edificar con cualquier cosa, sino tiene que ser de acuerdo a la Palabra de Dios.
Y ahora, estamos en la construcción de la parte más importante, la parte que corona el Templo espiritual de Cristo, la Edad de la Piedra Angular, la Edad del Lugar Santísimo, la cual es la más importante de todas porque es la Etapa o Edad a donde la segunda Venida de Cristo será cumplida.
Es un misterio que no se sabía y en todas las edades estuvieron esperando la Venida del Señor, pero cuando fue construido el tabernáculo que construyó Moisés, vean fue dedicado cuando se completó la construcción. Cuando Salomón construyó el templo, lo dedicó, pero tuvo que terminar hasta el Lugar Santísimo; hasta que *esté construido el Lugar Santísimo que es lo último, no está el templo completo para ser dedicado a Dios, para Dios morar en toda Su plenitud.
Ahora, encontramos que el Templo espiritual de Cristo completa su construcción en la etapa de la Edad de la Piedra Angular, y luego vendrá la dedicación de ese Templo en donde Cristo vendrá y resucitará a los muertos creyentes en Él, vendrá con ellos, les dará cuerpos eternos (eso será la resurrección) y a los vivos los transformará.
Él vendrá a Su Templo, Su Iglesia en la etapa de la Edad de la Piedra Angular. ¿Y cómo sabemos que es para la Edad de la Piedra Angular? Pues no fue para las otras edades, si no fue la segunda Venida de Cristo para las otras edades, entonces ¿para cuál tiene que ser? Para la Edad de la Piedra Angular que es la Edad del Lugar Santísimo. Cuando fue dedicado el tabernáculo por Moisés y el templo por Salomón, ¿a dónde entró Dios con la Columna de Fuego, en la Columna de Fuego? Entró en el Lugar Santísimo y se colocó sobre el Propiciatorio que es la tapa de oro del arca del Pacto, porque ese es el Trono de Dios en el tabernáculo y en el templo que construyó el rey Salomón; y así es en la Edad de la Piedra Angular, que es la Edad del Lugar Santísimo, ahí está la Palabra. Fue llevada la Palabra al Lugar Santísimo en el tiempo de Moisés y también en el tiempo de Salomón, y es llevada la Palabra, que es Cristo al Lugar Santísimo de ese templo espiritual.
Y ahora, ya la Palabra no está en la primera, segunda, tercera, cuarta, quinta, sexta o séptima edad, porque ya esas edades pasaron; pero ha sido traída ¿dónde? A la Edad de la Piedra Angular, ahí está la Palabra, el mensaje divino para este tiempo final; y ese es el mensaje que Dios respalda y respaldará para siempre. Respalda el mensaje correspondiente a cada tiempo en el tiempo que está vigente esa edad o etapa.
Con ese mensaje se estará dando a conocer todas las cosas que han de suceder, o sea, es un mensaje profético con el cual el Espíritu Santo estará hablando y dando a conocer todas estas cosas que han de suceder pronto; para lo cual Cristo dice: “Yo Jesús he enviado mi Ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.” [Apocalipsis 22:16]
Ese es el mensajero enviado por Cristo para todas las Iglesias, para dar testimonios de estas cosas en las Iglesias, y es el mismo mensajero para profetizar sobre muchos pueblos, naciones y lenguas en Apocalipsis, capítulo 10 y capítulo 11, donde ya aparece el ministerio hablando, profetizando las cosas que suceden o sucederán; así como Moisés hablaba, Dios le decía: “Dí que va a venir tal plaga,” y entonces Moisés la decía y eso venía a ser la Palabra de Dios, Palabra creadora y aparecía, en muchas ocasiones aparecían las cosas gradualmente, digamos dijo: “Sean moscas o vendrán moscas,” y no se veían moscas, y de momento sale una volando, y de momento aparece otra y sigue así, hasta que son millones de moscas, ¿ven?
No necesariamente las cosas tienen que aparecer todas a la vez, puede aparecer gradualmente; como en la familia, puede haber una familia de cientos de personas, pero todos no nacieron a la misma vez, ¿ven? Es gradualmente.
Así son las plagas también. Las plagas que cayeron sobre Egipto vinieron gradualmente una primero, después otra y así por el estilo; y también las plagas que han caído durante la dispensación de la Gracia, cuando termina el ministerio el mensajero de cada edad y se lo lleva Dios, luego cae una plaga sobre el pueblo que rechazó ese mensaje, sobre el planeta Tierra cae una plaga, un juicio. Para este tiempo final son siete plagas consecutivas, o sea, será un resumen de lo que pasó ya en las edades pasadas.
Y ahora, estamos en el tiempo más glorioso de todos tiempos para los creyentes en Cristo, para estas Piedras vivas que serán a imagen y semejanza de la Piedra viva principal, Jesucristo nuestro Salvador; serán todos a imagen y semejanza de Dios como ha sido prometido, y es un privilegio grande pertenecer a este Templo espiritual que está siendo formado, construido por Piedras vivas, seres humanos creyentes en Cristo nuestro Salvador.
Así que, Piedras vivas, hijos e hijas de Dios creyentes en Cristo, adelante trabajando en el Cuerpo Místico de Cristo en la Obra correspondiente a nuestro tiempo, porque la bendición que nos ha tocado es la más grande de todas las bendiciones en la Iglesia del Señor Jesucristo, es la más grande de todas.
Esta bendición quiso conquistarla Jacobo y Juan, y muchas otras personas también quisieron conquistar, obtener esta bendición; pero nos toca a nosotros, aun el séptimo mensajero quiso también conquistarla, es que en la bendición que hay para la Edad de la Piedra Angular están todas las bendiciones de Dios prometidas para el Día Postrero.
Por lo tanto, apreciando esta bendición que nos ha tocado y siendo agradecidos a Dios, servimos a Dios con toda nuestra alma y con buen ánimo de corazón, o sea, de todo corazón por amor a Cristo y agradecimiento a Cristo por lo que ha hecho por nosotros.
Así que, Piedras vivas, amando la gran Piedra viva, la Piedra del Ángulo, Jesucristo nuestro Salvador, trabajemos con toda nuestra alma y nuestra fe en la Obra del Señor en este tiempo final.
Aprecio y agradezco mucho el respaldo que le están dando al proyecto de La Gran Carpa Catedral en Puerto Rico, y también el respaldo que le están dando a la obra misionera y evangelística, y también el respaldo que le están dando a AMISRAEL.
Se está llevando a cabo una labor muy importante en todas las esferas, y todo eso es para bendición de las personas que viven en el planeta Tierra, pues deseamos lo mejor para todas las personas, así como deseamos también lo mejor para nosotros; pero no somos egoístas, también compartimos con todos para que todos tengan la misma oportunidad.
Si el doctor Salomón Cunha y la doctora Kélita Cunha están por internet o por el satélite, reciban un saludo de mi parte, y que Dios me los bendiga y les guarde y les use grandemente allá en Jerusalén donde se encuentran, en las labores que están llevando a cabo de AMISRAEL. Dios les bendiga, te bendiga Salomón y Kélita, y nos veremos muy pronto (y cualquier cosa… pues tenía el teléfono aquí pero ahora no lo tengo, pero pueden llamar, está cargando allá en la habitación).
Hay mucho trabajo para llevar a cabo a favor del pueblo hebreo, y este es el tiempo; es importante saber muchas cosas sobre el pueblo hebreo, pero gradualmente las van a estar conociendo y van a saber claramente porqué Israel no recibió a Cristo Jesús, y porqué tampoco ha creído en el Evangelio de Cristo Israel como nación.
No se ha dado a conocer abiertamente, no lo he hecho para evitar que algunas personas vayan a imitar y vayan afectar el trabajo que se está haciendo con Israel, porque es un trabajo para bendición de Israel, que tanto necesita, pues Israel necesita la bendición y protección de Dios, está en un tiempo muy peligroso Israel, está en riesgo de desaparecer; aunque pensarían: “No desaparecerían solos,” claro que no, desaparecería todo el Medio Oriente; si Israel desaparece, desaparece toda la familia humana.
Si las naciones supieran eso estarían protegiendo más a Israel; es que recuerden que la Escritura dice: “El que te bendiga será bendito; y el que te maldiga será maldito.” Y por consiguiente si cae una maldición sobre Israel, echan alguna maldición sobre Israel, quien la eche y la nación que la eche y demás naciones que se pongan de acuerdo también en eso, serán destruidos, serán malditos, son maldecidos conforme a la Escritura.
Ahora, es un pueblo, vean, que si lo bendicen las personas, son benditas; si lo maldicen las personas y naciones son malditas; o sea, ayudando a Israel las gentes y las naciones pueden recibir grandes bendiciones; es algo que es importante que las naciones e individuos conozcan para que sepan cómo recibir bendiciones, cómo obrar bien y cómo agradar a Dios con relación al pueblo hebreo.
Bueno, que Dios me les bendiga y les guarde a todos; y ya nos veremos dentro de algunas horas, pocas horas; ya estamos muy cerca de la próxima actividad.
Que Dios les bendiga y les guarde, y continúe usándoles grandemente en Su Obra en este tiempo final.
Pasen todos muy buenas tardes, dejo con ustedes al misionero, doctor Miguel Bermúdez Marín para finalizar ya nuestra parte; y regresaremos luego más tardecito para estar otra vez platicando el tema… ¿lo tienes ahí, Miguel, a la mano? “LA IGLESIA DE JESUCRISTO RECONOCIENDO SU POSICIÓN EN EL DÍA POSTRERO.” De lo que les hablaba que íbamos a hablar pero más tarde, sobre la posición de la Iglesia y por consiguiente cada miembro de la Iglesia, reconociendo en qué posición está en el Cuerpo Místico de Cristo, o sea, en qué edad estamos. Si piensa que está en la edad de Lutero, pues va a actuar como los luteranos del tiempo de Lutero, y así por el estilo; o si piensa que está en el tiempo de Wesley va a actuar como actuaron los creyentes del tiempo de Wesley.
Así que… y si piensa que estamos en la edad pentecostal, la edad que le toca como mensajero al reverendo William Branham, pues van a actuar como pentecostales. Tan sencillo como eso. Pero la Iglesia del Señor Jesucristo en el Día Postrero, en la Edad de la Piedra Angular, no es de ninguno de esos grupos, ni de San Pablo, ni de ninguno de los siete mensajeros.
Por lo tanto, va actuar de acuerdo al Programa Divino que hay para la Edad de la Piedra Angular.
Bueno, si quieren más, pues entonces ya no tenemos que volver en la tarde Miguel… ya en la tarde volvemos, que Dios les bendiga y les guarde a todos.
“LA PIEDRA DEL ÁNGULO ESCOGIDA Y PRECIOSA.”