Muy buenas noches, amados amigos y hermanos presentes, y los que están en diferentes naciones, ministros e iglesias conectadas con esta transmisión; Miguel Bermúdez Marín allá en la iglesia Corporación La Voz de la Piedra Angular, donde el Dr. Francisco Martínez es el ministro. Reciban mis saludos allá, Dr. Martínez y Dr. Miguel Bermúdez Marín, y todos los ministros allá reunidos y los hermanos y hermanas allí presentes; y también los que están en diferentes países, ministros y sus congregaciones:
Mis saludos y que Dios los bendiga a todos, y nos abra el entendimiento y las Escrituras para comprender la Palabra del Señor, el tema que corresponde a la escuela bíblica del próximo domingo, del cual tendremos una corta introducción en esta ocasión.
En el Nombre del Señor Jesucristo, que sean abiertos vuestros sentidos, vuestro entendimiento y las Escrituras para comprenderlas. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.
Para la introducción de nuestro tema para la escuela bíblica del próximo domingo es: “LOS ÁNGELES TRAYENDO LA REVELACIÓN DE LOS SIETE SELLOS”. Ese es el tema de la escuela bíblica para el próximo domingo, del cual tendremos dentro de unos momentos la introducción a ese tema.
Para lo cual leemos en San Mateo, capítulo 24, versos 29 al 31; y dice de la siguiente manera:
“E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria.
Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro”.
Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla.
La promesa que contiene el secreto más grande de toda la Biblia es la Venida del Señor, la Venida del Hijo del Hombre para el tiempo final; y dice que será como el relámpago que sale del Oriente y se muestra hasta el Occidente.
Dice que vendrá en las nubes con Sus Ángeles. Dice que enviará Sus Ángeles con Gran Voz de Trompeta y juntará a Sus escogidos. Los escogidos son los ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, doce mil de cada tribu, que aparecen en Apocalipsis, capítulo 7, verso 1 en adelante. También dice que será con Gran Voz de Trompeta.
Eso será para este tiempo final que estas promesas proféticas tienen que ser cumplidas.
La señal del Hijo del Hombre en el cielo apareció en el 1963, en febrero 28, en Tucson, Arizona. Esa es la señal del Hijo del Hombre en el cielo, donde le aparecieron al reverendo William Branham siete ángeles mensajeros, de los cuales estaban los mensajeros de cada edad allí presentes, el reverendo William Branham y un Ángel mensajero que era diferente a los demás, que era el Ángel que tiene el Séptimo Sello. Ese es el Ángel más misterioso de todos, porque el misterio más grande de toda la Biblia es el misterio del Séptimo Sello.
Por lo tanto, la señal del Hijo del Hombre en el cielo ya fue vista, salió en la revista LIFE; la prensa no comprendió lo que significaba; como tampoco en el Monte de la Transfiguración, lo que sucedió allí, no lo comprendieron otras personas, excepto los discípulos de Jesucristo; porque era para ellos esa visión.
Y la señal del Hijo del Hombre en el cielo es para los creyentes en Cristo que recibirán la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero.
Por consiguiente, los creyentes en Cristo en el Día Postrero, bajo la Tercera Etapa recibirán la fe, la revelación para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero, en una Edad de Piedra Angular. No Edad Luterana, ni Edad Wesleyana, ni Edad Pentecostal, sino Edad de Piedra Angular.
Ahí es donde se cumplirá la Venida del Ángel Fuerte que desciende del Cielo; ahí es donde llamará y juntará a Sus escogidos, que son ciento cuarenta y cuatro mil hebreos (o judíos, como le llaman), doce mil de cada tribu. Y eso será el cumplimiento de esa profecía.
Por lo tanto, tenemos que estar preparados, porque los creyentes en Cristo en la Edad de la Piedra Angular, que es una edad judía…; porque ya las edades gentiles han terminado, las siete edades de la Iglesia han llegado a su fin en este tiempo final. La Edad de Piedra Angular es una edad judía, en donde Dios llama y junta los escogidos judíos, doce mil de cada tribu, en el Día Postrero. Y recuerden que la mayoría de los ciento cuarenta y cuatro mil pertenecen a las tribus perdidas.
Por lo tanto, esas tribus que están perdidas entre los gentiles del mundo entero, que es el tesoro perdido que el Señor encontró y escondió luego, son los judíos o hebreos, las tribus del Norte, del reino del Norte, encabezados por la tribu de Efraín, que es la que tiene la bendición de la primogenitura.
Y LOS ÁNGELES TRAYENDO LA REVELACIÓN DE LOS SIETE SELLOS, son los ángeles de las siete etapas o edades de la Iglesia; y los Ángeles que vienen con Gran Voz de Trompeta son los Dos Olivos, los ministerios de Moisés y de Elías, de Zacarías, capítulo 4, versos 1 al 14; y Apocalipsis, capítulo 11, verso 1 al 14.
Eso es la aparición… En la aparición de los Ángeles en el 1963, de febrero 28, la señal del Hijo del Hombre en el cielo con Sus Ángeles viniendo.
“LOS ÁNGELES TRAYENDO LA REVELACIÓN DE LOS SIETE SELLOS”.
Que las bendiciones de Cristo, el Ángel del Pacto, sean sobre cada uno de ustedes y sobre mí también, y siempre nos abra las Escrituras y el entendimiento para comprender. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén.
Si hay alguna persona que todavía no ha recibido a Cristo como Salvador, lo puede hacer en estos momentos aquí o en el país donde se encuentre, y estaremos orando por usted. Para lo cual, puede pasar al frente para recibir a Cristo allá en el país y en el lugar donde se encuentra en estos momentos.
Vamos a dar unos minutos mientras pasan al frente los que todavía no han recibido a Cristo, para recibirlo como único y suficiente Salvador.
Vamos a estar puestos en pie mientras pasan las personas en diferentes países para recibir a Cristo como único y suficiente Salvador.
Los niños de 10 años en adelante también pueden pasar al frente para recibir a Cristo como único y suficiente Salvador. Recuerden que Cristo dijo: “Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos”. [San Mateo 19:14]
Vamos a inclinar nuestros rostros para orar por las personas que están viniendo a los Pies de Cristo nuestro Salvador:
Padre celestial, en el Nombre del Señor Jesucristo vengo a Ti con todas estas personas que están recibiendo a Cristo en diferentes países como único y suficiente Salvador. Recíbeles en Tu Reino, te lo ruego en el Nombre del Señor Jesucristo.
Y ahora todos los que están recibiendo a Cristo repitan conmigo esta oración:
Señor Jesucristo, escuché la predicación de Tu Evangelio y nació Tu fe en mi corazón, en mi alma.
Creo en Ti con toda mi alma. Creo en Tu Primera Venida, creo en Tu Nombre como el único nombre bajo el Cielo, dado a los hombres, en que podemos ser salvos. Creo en Tu muerte en la Cruz del Calvario como el Sacrificio de Expiación por nuestros pecados.
Creo en Ti con toda mi alma. Creo en Tu Sacrificio como Cordero de Dios, como el Cordero Pascual.
Y Señor, te recibo como mi único y suficiente Salvador. Te ruego perdones mis pecados y con Tu Sangre me limpies de todo pecado, me bautices con Espíritu Santo y Fuego, y produzcas en mí el nuevo nacimiento.
Quiero nacer en Tu Reino, quiero vivir eternamente Contigo en Tu Reino. Señor, haz una realidad la salvación que ganaste para mí en la Cruz del Calvario. Te lo ruego en Tu Nombre Eterno y glorioso, Señor Jesucristo. Amén y amén.
Y ahora las palabras del Señor fueron: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado”. (San Marcos, capítulo 16, versos 15 al 17).
Por lo tanto, los que han creído preguntarán: “¿Cuándo me pueden bautizar?” Por cuanto ustedes han creído en Cristo como Salvador, bien pueden ser bautizados; y que Cristo les bautice con Espíritu Santo y Fuego, y produzca en ustedes el nuevo nacimiento.
El agua no quita los pecados, es la Sangre de Cristo la que nos limpia de todo pecado; pero el bautismo en agua es un mandamiento del Señor Jesucristo. El mismo Jesucristo fue bautizado por Juan el Bautista, para luego recibir el Espíritu Santo cuando subía de las aguas bautismales. Y si Cristo tuvo necesidad de ser bautizado para recibir luego el Espíritu, ¡cuánto más nosotros!
Por lo tanto, es importante, entendiendo el significado del bautismo, que cada persona que escuche y cree sea bautizado en agua para que Cristo lo bautice con Espíritu Santo y Fuego, y produzca en la persona el nuevo nacimiento.
En el bautismo en agua la persona se identifica con Cristo en Su muerte, sepultura y resurrección, porque estábamos en Cristo. Y cuando Cristo fue bautizado, allí también estábamos nosotros en Él; y cuando Él murió, allí estábamos con Él; cuando Él fue sepultado, estábamos en Él; y cuando Él resucitó, estábamos en Él también.
Así como físicamente cuando su padre estaba en la Tierra, el padre de cada persona…, así como en Abraham estaba cada descendiente de Abraham, y Leví (dice San Pablo) estaba en los lomos de Abraham, luego también estuvo en los lomos de Isaac y luego en los lomos de Jacob.
Por lo tanto, así como físicamente estábamos en los lomos de nuestro padre terrenal como uno de los genes de nuestro padre terrenal, así estábamos en Cristo nosotros; somos genes del pensamiento divino. Por lo tanto, estábamos en Él desde antes de la fundación del mundo.
Así que por eso nos identificamos con Cristo en Su muerte sepultura y resurrección al ser bautizados en agua en Su Nombre.
Bien pueden ser bautizados los que han recibido a Cristo como Salvador; y que Cristo les bautice con Espíritu Santo y Fuego, y produzca en ustedes el nuevo nacimiento, nazcan en el Reino de Dios, nazcan del Agua y del Espíritu: de la Palabra y del Espíritu Santo, como dice Cristo a Nicodemo en San Juan, capítulo 3, verso 1 al 6.
Que Dios les bendiga y les guarde; y continúen pasando una noche feliz, llena de las bendiciones de Cristo nuestro Salvador. Y nos veremos aquí el próximo domingo, Dios mediante, en la mañana, para la escuela bíblica sobre el tema: “LOS ÁNGELES TRAYENDO LA REVELACIÓN DE LOS SIETE SELLOS”.
Dios les bendiga y les guarde; y continúen pasando una noche feliz, llena de las bendiciones de Cristo nuestro Salvador, todos ustedes presentes y los que están en otras naciones.
Dejo con ustedes al reverendo José Benjamín Pérez, y en cada nación dejo al ministro correspondiente, para que les indique cómo hacer para ser bautizados en agua en el Nombre del Señor Jesucristo.
Ya en cada país dejo al ministro correspondiente, y aquí al reverendo José Benjamín Pérez.
Dios les bendiga y les guarde, y continúen pasando una noche feliz, llena de las bendiciones de Cristo nuestro Salvador.
“LOS ÁNGELES TRAYENDO LA REVELACIÓN DE LOS SIETE SELLOS”.